Hay una creciente alarma entre los analistas por el deterioro de Pemex, pero sobre todo por los compromisos financieros que tiene que cubrir durante el 2024, por lo que podría convertirse en la papa caliente del gobierno federal.
Nos adelantan que las distintas calificadoras internacionales ven “con lupa” el desempeño de la empresa productiva del estado porque su grave situación financiera podría poner en aprietos a la calificación de la deuda soberana del país.
En este momento, agregaron, se requiere que la Secretaría de Hacienda y el consejo de Pemex tomen decisiones urgentes y busquen la forma de renegociar su deuda cuyos vencimientos serán significativos el siguiente año.
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Nos dicen que el pronóstico para Pemex no es nada alentador en el corto y mediano plazos, incluso, podrían limitarse más sus fuentes de financiamiento de bancos, inversionistas y proveedores. En la actualidad, Pemex es la compañía más endeudada del mundo con pasivos por más de 107,000 millones de dólares y la que más dinero ha perdido en los últimos años.
La situación se agrava por el aumento de los costos de extracción de Pemex, que pasaron de 19.14 dólares por barril en 2021 a 26.15 dólares por barril en 2022.
Los especialistas aseguran que hay varias propuestas sobre la mesa para tratar de mitigar los problemas financieros de Pemex, incluso tanto autoridades como legisladores evalúan alternativas y estudian los modelos recientes de otras petroleras, tal es el caso de Colombia y Brasil.
Los que más saben del tema insisten en que una de las opciones que salvaría y mitigaría la situación financiera de Pemex sería colocar una parte de la empresa en los mercados accionarios, ya que ello además de inyectarle liquidez, fortalecerá su gobierno corporativo, su consejo de administración y permitirá que la toma de decisiones estratégicas no sean por caprichos u ocurrencias.
En su evaluación de hace unos meses, Fitch Ratings destacó que a pesar de los cuantiosos apoyos del gobierno federal, Pemex se encuentra en una situación crítica, incluso, representa la mayor preocupación en términos de liquidez y deuda entre las petroleras de América Latina.
Nos adelantan que organismos del sector privado llevarán ante las candidatas a la Presidencia de la República su creciente inquietud en torno a Pemex y harán una serie de planteamientos que permitan darle una salida a su compleja situación.
Piden replantear política energética
De la mano con la grave situación de Pemex, los especialistas piden replantear la política energética ante el rezago en el avance de energías renovables, lo que de continuar en la misma dirección frenará aún más el cumplimiento de los compromisos nacionales e internacionales de alcanzar una generación de 35% de energías limpias.
Nos dicen que en la evaluación sobre el cumplimiento de los acuerdos, México se ubica con un esfuerzo insuficiente, ya que continúa la quema de carbón y combustóleo, por lo que se requiere una reestructuración del sector y enfocarse a los negocios que sí son rentables, así como cerrar refinerías obsoletas y contaminantes.
Así las cosas…