La inflación persistente y un menor crecimiento económico ha hecho que los consumidores mexicanos tengan cautela a la hora de hacer sus compras, por lo que este año el 57% adquiere productos de marcas más económicos, así lo muestra el estudio Tendencias del Consumidor mexicano 2025.
El reporte realizado por Kantar refiere que este año el comportamiento de los consumidores muestra que hay una reducción en sus gastos y es más discrecional, además a la hora de comprar son más sensibles al precio por lo que están en la búsqueda activa de marcas más accesibles.
“La confianza del consumidor en México enfrenta un periodo delicado, producto de y presiones externas. Debido a este entorno se está reconfigurando el comportamiento de compra de los mexicanos”, destaca el estudio.
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De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante mayo el consumo privado de los mexicanos cayó 1.0 %, comparado con el mes anterior, y es su mayor descenso de los últimos cinco meses.
Contexto: Según los especialistas el consumo en nuestro país está perdiendo dinamismo debido a una combinación de un menor crecimiento económico, inflación persistente, tasas de interés altas, debilitamiento del empleo y remesas, incertidumbre comercial y política, lo cual ha impactado el consumo.
Apuestan por lo Hecho en México
El estudio también muestra que ante el entorno internacional adverso sobre todo por las políticas de Donald Trump, el 52% de los mexicanos aseguró que va incrementar el consumo de las marcas hechas en México.
Otro hallazago en las preferencias de los consumidores es que existe un aumento en la compra de marcas propias y de menor precio, impulsadas por un consumidor mexicano más racional pero también más exigente con las empresas.
¿Por importan las compras?
El consumo que realizan las personas es un indicador que muestra cómo va la economía, debido a que el comportamiento del gasto que realizan los hogares, incluye compras como alimentos, ropa, transporte, educación, salud, servicios de entretenimiento, entre otros que mueve la economía del país.
Además, es uno de los componentes más importantes del Producto Interno Bruto (PIB), ya que refleja directamente el comportamiento económico de los ciudadanos y su capacidad de compra.