En recientes declaraciones en Estados Unidos, la canciller, Alicia Bárcena, comunicó que México trabaja en conjunto con China para identificar y controlar el comercio de insumos químicos que se emplean en la elaboración del fentanilo, un opioide sintético de alta potencia y que es uno de los temas que más énfasis tiene por parte del gobierno norteamericano.
La información se presentó en el marco de un evento mundial centrado en el combate a las drogas sintéticas, organizado por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en el contexto de la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General de la ONU, celebrada en Nueva York.
La canciller subrayó:
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"Quiero informarles que México ha establecido una comunicación muy estrecha con China, con India y con Corea porque queremos analizar las cadenas de valor de los precursores químicos de la producción del fentanilo y queremos ayudar en este tremenda pandemia", dijo.
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El presidente Andrés Manuel López Obrador, en diversas ocasiones ha afirmado que su compromiso con Estados Unidos y Canadá en abordar esta delicada situación. Es relevante señalar que el fentanilo es un opioide cuyo impacto es 50 veces más potente que la heroína. De acuerdo con datos estadounidenses, los cárteles mexicanos lo producen usando componentes adquiridos en China, siendo luego distribuido en Estados Unidos. Solo el año anterior, esta droga causó la muerte de más de 70,000 personas en ese país.
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A pesar de las afirmaciones estadounidenses, López Obrador ha manifestado en múltiples ocasiones que el fentanilo no se fabrica en territorio mexicano, señalando que el mismo proviene directamente de China.
Es importante recordar que, hace unos meses, el presidente mexicano envió una misiva a Xi Jinping, líder chino, solicitando apoyo en el combate contra el fentanilo. Sin embargo, China ha rechazado tener algún grado de responsabilidad en la distribución de esta droga y no ha adherido a la iniciativa global anti-fentanilo impulsada por Estados Unidos.
Reforzando el compromiso de México en el combate de esta droga, la canciller Bárcena mencionó la reciente extradición a Estados Unidos de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín "el Chapo" Guzmán, así como el decomiso de dos millones de pastillas de fentanilo en el estado de Sinaloa.
Finalmente, Bárcena enfatizó que la problemática del fentanilo no solo debe ser tratada como una situación de seguridad, sino también como una crisis de salud pública. Es fundamental, dijo, atender las raíces que conducen al consumo de esta potente sustancia.
Con información de EFE.
DJC