Antony Blinken, el secretario de Estado de Estados Unidos, tiene programada su llegada a Ciudad de México este miércoles. Planea sostener conversaciones con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y otros funcionarios de alto rango. Los principales temas de discusión serán el incremento en el tráfico y consumo de fentanilo y los crecientes desafíos en la frontera debido a la migración.
Washington señala que el fentanilo, que ha resultado en más de 70,000 sobredosis mortales en Estados Unidos, es producido por cárteles mexicanos con productos químicos originarios de China. Sin embargo, el presidente López Obrador sostiene que el fentanilo entra directamente desde China, aunque se han desmantelado varios laboratorios clandestinos en México.
Adicionalmente, se espera que Estados Unidos solicite una mayor colaboración por parte de México en la extradición de narcotraficantes y en el desmantelamiento de laboratorios clandestinos.
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Acompañando a Blinken en esta visita, se encuentra una comitiva de alto nivel. Esta delegación incluye al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas; el fiscal general, Merrick Garland; la asesora de Seguridad de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall, entre otros. La agenda oficial comenzará con un encuentro entre Blinken y la canciller, Alicia Bárcena, con quien ya tuvo un encuentro la semana pasada en Washington. Se espera una rueda de prensa después de su reunión, que culminará con una visita a Palacio Nacional.
El tráfico de drogas, el flujo de armas y los desafíos migratorios serán discutidos el jueves, durante el Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad. Es importante resaltar que el país ha demostrado su cooperación, sumándose a la iniciativa global de Estados Unidos contra el fentanilo. El mes pasado, el gobierno extraditó a Ovidio Guzmán, hijo del famoso narcotraficante "El Chapo", acusado de traficar con fentanilo.
Además, hay peticiones de Washington para la captura y extradición de los otros tres hijos del Chapo, conocidos como "Los Chapitos". Paralelamente, México enfatiza la necesidad de que Estados Unidos controle el tráfico de armas que fortalece al crimen organizado y amplifica la violencia en el país.
El tema migratorio también será central en las discusiones. Tras levantar el Título 42, una política de deportaciones instaurada durante la pandemia, la situación en la frontera sigue siendo inestable. Estados Unidos ha dejado claro que no tiene las puertas abiertas para inmigrantes indocumentados. El aumento de campamentos en el río Bravo y la interrupción de trenes de carga en el país debido a la presencia de migrantes son preocupaciones actuales.
La canciller Bárcena mencionó que México está considerando implementar vuelos de deportación a varios países de América del Sur para aquellos migrantes atrapados en las ciudades fronterizas con Estados Unidos. La llegada de Blinken a México es desde Texas, y aterrizará en el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA).
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, comentó hace un par de días que frenar el tráfico de fentanilo y resolver la crisis migratoria en la frontera son "responsabilidades compartidas" entre Estados Unidos y México.
El jefe de la diplomacia estadounidense hizo estas declaraciones durante una charla en la Universidad de Rice, en Houston (Texas), el día antes de viajar a México para abordar asuntos de narcotráfico y migración con el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
"La relación con nuestro vecino es posiblemente la más importante que tenemos por el impacto que tiene en la vida de nuestros ciudadanos de muchas maneras buenas, pero también con muchos desafíos", declaró.
Entre ellos, Blinken citó el narcotráfico y la crisis migratoria, pero también las armas estadounidenses que se trafican hacia México y que acaban en manos del crimen organizado.
Para el secretario de Estado, Washington y México tienen la "responsabilidad de trabajar juntos para lidiar con estos desafíos" dado que los problemas en la frontera "no son un camino de un solo sentido, sino de doble sentido".
"Con mi propia experiencia, puedo decir que la cooperación que tenemos con México nunca antes había sido tan fuerte", afirmó Blinken, aunque admitió que todavía es "insuficiente" para resolver todos los desafíos.
Con información de EFE.
DJC