FEMINICIDIO

El novio de Sandra la aventó de un auto en movimiento y murió, pasará 31 años en la cárcel

Sandra también fue víctima de violencia institucional, ya que el médico que la atendió en el Hospital General de Pachuca la regresó a casa pese a las lesiones que presentaba. Horas más tarde falleció

Sandra fue violentada por su novio en reiteradas ocasiones hasta que le provocó la muerte.Créditos: Imagen creada con Inteligencia Artificial
Escrito en HIDALGO el

PACHUCA. - El novio de Sandra la seguía a diferentes lugares, la espiaba en su casa, se metía a su domicilio sin autorización, la amenazaba, le quitaba sus pertenencias, incluso a su mascota, ella le tenía miedo y en diferentes ocasiones pidió ayuda a su familiares por la situación que estaba viviendo. Luego de violentarla en distintas ocasiones, terminó por aventarla de un auto en movimiento, lo que horas mas tarde le provocó la muerte. Su agresor pasará 31 años de prisión por el delito de feminicidio. Así es la historia.

Sandra vivió con él por un tiempo, pero después decidió dejarlo, porque sus celos no tenían límite. Le hacía escándalos afuera de su trabajo, le decía ofensas como “pendeja, estúpida, no vales la pena, no vales nada”. Él la buscaba, la acosaba, iba a los lugares a los que sabía que Sandra estaría, hasta que la convenció y regresó con él, ahora como novios.

En 2018, una noche antes del día de San Juan, Sandra y su novio - al que pondremos nombre de Gerardo -asistieron a una fiesta con los amigos de él. Ella bailó, platicó y bebió unos tragos. Después se cansó y se retiró junto con su novio, quien salió a regañadientes y enojado.

Ya en el auto, él quería que ella se quedara y empezó a subir la voz, le dio una cachetada y luego un puñetazo en la boca y luego otro en la nariz. Llegaron a la casa del hombre y Sandra optó por hacerse la dormida.Ya entrada la madrugada, cuando pensó que el sujeto dormía, Sandra le llamó a su mamá y pidió que fuera por ella, se levantó, le habló a su hija de siete años que la acompañaba  y salieron de la casa, pero él despertó, la alcanzó y la subió a la camioneta.

Su hija de 7 años vio todo

En el camino, con el vehículo en movimiento, él la aventó hacia fuera y ella cayó contra la banqueta. Esos hechos fueron observados por la menor que ocupaba el asiento trasero de la unidad. 

La madre de Sandra ya iba en taxi para recogerla, pero cuando llegó con su hija, ella estaba tirada en el suelo, con su cara llena de sangre y sin poder recuperarse del golpe. Le reclamó a Gerardo y lo cuestionó sobre qué la había hecho, y su respuesta fue acelerar la camioneta para retirarse del lugar.

“Mi hija me llamó por teléfono, me dijo que fuera porque Gerardo le había pegado, que tenía miedo y aunque no tengo auto, salí y tomé un taxi donde más o menos me explicó que estaba en Mineral de la Reforma, pero no la encontré y cuando encontré la casa, la madre del sujeto me dijo que ya la había llevado a mi casa, así que me regresé y fue cuando topé la camioneta que iba a velocidad alta y alcancé a ver a mi hija tirada en el piso”, comenta la madre de Sandra.

Eran cerca de las cuatro de la madrugada del 24 de junio. La madre subió al taxi con Sandra, su nieta y se dirigió al Hospital General de Pachuca, pidió la atención médica y comentó que había sido golpeada por su novio y que su hija estaba mal, pero el doctor que la atendió le dijo que no tenía nada. Señaló que a lo mejor había tomado y la envió a su casa a descansar y la cita al hospital quedaba abierta por cualquier eventualidad.

Se llevó a Sandra a su casa, la recostó en la cama, le retiró la ropa y vio que su hija estaba amoratada de las piernas, le trató de dar cuidados, pero su hija no reaccionaba, pues le hablaba y no le contestaba. Llamó a una ambulancia, pero en lo que llegó, su hija empezó a torcerse y su vejiga no respondía, se orinó, ella sabía que eso no era normal, pero cuando llegaron los paramédicos ya no reaccionaba y el paramédico le dijo que su hija acababa de fallecer y que ya no tenía nada que hacer.

“Me llevé a mi hija a casa, la acosté en su cama, la desvestí y vi que traía su dinero entre las piernas y pensé pobre de mi hija tiene que esconder su dinero, porque el sujeto se lo quitaba, le quitaba todo; la seguí viendo mal, le hablaba y no respondía y por eso llamamos a la ambulancia, pero cuando ellos llegaron ya había muerto y tuve que ir a identificarla en el Semefo”.

Sandra fue violentada institucionalmente

De acuerdo con el documento emitido por la Comisión Especial para el Seguimiento de los Feminicidios, denominado "Feminicidios en México, tendencias y cambios, 1985- 2009", una de las particularidades de los asesinatos de mujeres es la brutalidad con que se les priva de la vida, de tal forma que una de cada cinco mujeres es asesinada directa y literalmente a manos de su agresor. 

Sandra fue aventada de un vehículo en movimiento a manos de quien era su novio y luego fue violentada institucionalmente en el Hospital General de Pachuca al haber solicitado atención y al percibir un olor a alcohol, el médico consideró que no era necesaria la atención y la mandó a su casa, donde horas más tarde perdió la vida, a causa del golpe y de la negligencia.

“Mi nieta presenció todo y ella le dijo a los jueces que Gerardo empujó a su mami, porque ella se había parado y él levantó su mano y la empujó para afuera de la camioneta”.

El feminicidio

Gerardo fue señalado del delito de feminicidio porque al aventar a Sandra de la camioneta, desencadenó un daño severo en el cerebro, que la llevó a perder la vida derivado de un hematoma subdural generalizado y fractura de la base de cráneo secundaria a traumatismo craneoencefálico severo.

De acuerdo con el Código Penal: Comete el delito de feminicidio quien por razones de género prive de la vida a una mujer y se le impondrá sanción de veinticinco a cincuenta años de prisión y de 300 a 500 días de multa… Se entiende que existen razones de género, cuando estemos en presencia de cualquiera de las siguientes circunstancias: . . .III.- Existan datos que establezcan que se han cometido amenazas, hostigamiento o aprovechamiento sexual, violencia o lesiones del sujeto activo en contra de la víctima. . . VI.- Habiendo existido entre el activo y la víctima alguna de las siguientes relaciones: sentimental, afectiva, de confianza, de parentesco o de hecho. . .” 

La perito en criminalística que hizo el levantamiento de cadáver describió que la víctima se encontraba en posición decúbito dorsal, recostada en su cama, a simple vista se veía con golpes en el tabique nasal y presentaba lesiones visibles en el rostro y cuerpo.  La cara y manos estaban llenas de sangre, pese a ello, el médico no realizó una revisión exhaustiva y lo único que consideró es darle un determinado medicamento y enviarla de regreso a su domicilio.

Violencia psicológica y física

La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en el artículo 6, fracción primera, establece que la violencia psicológica es cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad psicología, que puede consistir en: negligencia, abandono, descuido reiterado, celopatía, insultos, humillaciones, devaluación, marginación, indiferencia, infidelidad, comparaciones destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, a la devaluación de su autoestima e incluso al suicidio; violencia que se vio ejercida en contra de la víctima por parte del acusado.

La violencia física es cualquier acción intencional, en el que se utiliza parte del cuerpo, algún objeto, arma o sustancia para sujetar, inmovilizar o causar daño a la integridad física de las mujeres, independientemente de que se produzca o no lesiones físicas y que va encaminado a obtener su sometimiento.

La sentencia

El sujeto pasará 31 años en la cárcel y deberá pagar una multa de 28 mil 210 pesos; le restan 27 años, nueve meses y 26 días. Además, deberá pagar 407 mil 836 pesos a favor de la hija de Sandra.

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