Pachuca de Soto.- Este día del niño se registró otra detención de las personas involucradas en el caso por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito de Grupo Universidad en Hidalgo, esta vez fue Francisco Natalio Z. I., uno de los operadores financieros de líder universitario Gerardo Sosa Castelán.
Francisco Natalio fue detenido por agentes de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) en Pachuca de Soto, de acuerdo con el Registro Nacional de Detenciones (RND).
La detención del adulto mayor se registró sobre la autopista México-Pachuca, a la altura de la colonia San Antonio, alrededor de las 2:04 de la tarde.
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Lo anterior, debido a las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), la cual imputó la causa penal 263/2020 contra Francisco Natalio, Gerardo Sosa y otras ocho personas más la responsabilidad de operaciones con recursos de procedencia ilícita por 58 millones 200 mil pesos, dinero que fue tomado de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
¿Quién es Francisco Natalio?
Francisco nació en Pachuca, Hidalgo, el 14 de noviembre de 1946, es decir tiene 78 años de edad. Y pese a identificarse y desempeñarse como contador, no existe registro de número de cédula profesional en la dirección de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
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En octubre del 2009, Francisco Natalio estaba junto a Gerardo Sosa Castelán rindiendo protesta como tesorero y presidente, respectivamente, del Patronato Universitario de la máxima casa de estudios en Hidalgo.
Natalio estuvo a cargo del dinero universitario hasta el 2020, cuando comenzaron las investigaciones por irregularidades en las cuentas de la UAEH y por presuntamente utilizar una empresa fachada, Contabilidad del Siglo XXI Pachuca Sociedad Civil, para esconder recursos de la máxima casa de estudios de la entidad.
De enero a septiembre de 2017, Francisco Z.I., rentó el primer y segundo piso de un edificio en San Javier, Pachuca, para ser usados como oficinas de Movimiento Ciudadano (MC). Este contrato fue firmado por Óscar Damián Sosa Castelán -coordinador estatal de MC y hermano de Gerardo- y recibió un total de 417 mil 600 pesos por nueve meses de renta, es decir, cada mes tuvo un costo de 46 mil 400 pesos con el Impuesto al Valor Agregado (IVA) incluido.
Dicho inmueble ubicado en el número 302 de la calle Real del Valle, en el fraccionamiento Valle de San Javier, fue revisado por casi 50 elementos de la FGR con el fin de detener a Francisco Natalio, pero los esfuerzos ese 2 de septiembre de 2020 no rindieron frutos.
El ex tesorero del Patronato Universitario era buscado desde agosto de 2020, fue el día 7, cuando se emitieron las órdenes de aprehensión contra Francisco Natalio, seis personas más cercanas a Gerardo Sosa y acusadas por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita por 58 millones 200 mil pesos.
Los otros involucrados eran: María Cruz Campos Álvarez, María Luisa Montalvo Sierra, Juan Manuel Hernández Gayosso, Anastasia Elizabeth Baños Baños, y las hermanas Adriana y Ana Carmen Sosa Cravioto, hijas de Gerardo Sosa.
Entonces, el ahora detenido buscó amparos para no ser asegurado y presentado ante un juez, además de querer la liberación de sus cuentas bancarias -en las instituciones Banorte y Santander- bloqueadas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
En marzo de 2022, el ex funcionario universitario solicitó un amparo en el sexto Tribunal Colegiado en Materia Penal para protección de la justicia federal y evitar ser detenido por la Fiscalía General de la República, sin embargo, este le fue negado, ya que los magistrados consideraron que existía suficiente evidencia que lo incriminaba.
¿Qué hizo Natalio, por qué es complice?
De acuerdo con la causa penal 263/2020, la FGR investigó y detectó que Francisco Natalio tenía funciones de dirección en lo que se denominó como una organización criminal, la cual extraía recursos de aportaciones federales y estatales de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Después, Natalio recibía el dinero de la UAEH a través de cuatro despachos contables: Contabilidad Automatizada de Hidalgo, Contabilidad Especializada de Hidalgo, Eficiencia en Negocios Asociados y Corporativo Contable de Pachuca.
Una vez que los depósitos estaban hechos, transfería los recursos del erario universitario a la empresa fachada Contabilidad del Siglo XXI, cuyos beneficiarios eran Gerardo Sosa y sus hijas Adriana y Ana Carmén.
Este esquema les daría la pauta para legalizar el capital y ocultar el origen de los 58 millones 200 mil pesos de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
La investigación de la FGR comenzó cuando detectaron que dicha empresa no emitía facturas o CFDIs, no tenía empleados o registros ante Hacienda que hiciera visible que funcionaba como un despacho contable. Además, hicieron depósitos provenientes de la institución educativa, sin justificación alguna.
emh