Incertidumbre, zozobra y miedo se respira en Chilpancingo a tres días de la decapitación del alcalde electo Alejandro Arcos; trabajadores del ayuntamiento temen que civiles armados irrumpan en el palacio y disparen en contra del inmueble, tampoco saben nada de los que serán los nuevos funcionarios pues están azorados por lo ocurrido al edil, secretario general y al que sería secretario de seguridad pública.
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El ayuntamiento de la capital de Guerrero, estuvo la noche de este martes iluminado con velas, coronas con flores blancas colocadas en la entrada principal y a su alrededor decenas de ciudadanos que siguen consternados por tan semejante acto de barbarie.
Una mujer derrama lágrimas mientras se queda fijamente mirando el rostro del alcalde en una foto en la puerta del inmueble, luego voltea a ver los letreros: " A los buenos políticos los matan o los callan, pero los malos perduran". "Solo Así pudieron acabar con tu sonrisa y tus ganas de servir al pueblo".
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Moños negros colocados en cada oficina del gobierno municipal, dos mujeres policías cuidan el recinto, los horarios de atención siguen igual, de 9:00 am a 3:00 pm; por la tarde la jornada de administrativos se va de 3:00 a 9:00 de la noche, pero con la novedad que el último turno es el del miedo por la advertencia de que no salgan después de las 8: 00 de la noche porque serás levantado.
Los trabajadores del ayuntamiento esperan la próxima sesión de cabildo para que tome posesión el que será el nuevo alcalde, el doctor Gustavo Alarcón Herrera, que estaba registrado en la planilla como suplente. Del secretario general y director de seguridad pública nada saben aún.
En calles y avenidas de Chilpancingo se observa todo con normalidad. El luto lo llevan por dentro dicen algunos ciudadanos. Los comercios y el transporte público sin problemas, la gente camina de un lado a otro en sus actividades rutinarias; una patrulla de la Guardia Nacional circula cerca del Mercado Baltazar Leyva Mancilla en la zona comercial y otros uniformados de la policía del estado en calles aledañas al palacio municipal.
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Al principio se llegó a pensar que la advertencia de que "no quieren a nadie en las calles", era solo eso, un trascendido. Pero en un recorrido que este reportero hizo en calles del centro donde decenas de personas caminaban como si nada, se sorprendió porque tan ciertamente como el reloj marcó 8:00 de la noche, la multitud de gente desapareció y la capital quedó como pueblo fantasma, cuando antes eran las 11:00 de la noche y todos seguía realizando actividades diurnas.
El señor Hermenegildo Luna Pérez, originario de Chilapa, vino a Chilpancingo a comprar unas medicinas, al preguntarle sobre lo ocurrido el pasado domingo al edil asentó: "Se imagina, lo que le hicieron al presidente municipal, qué le espera a los ciudadanos de a pie". Luego agregó que la gente no es que se espante, pero tiene miedo que algo peor pueda pasar en esta ciudad donde está el centro de los poderes.
Y es que al presidente municipal, Alejandro Arcos, no alcanzó hacer mucho en 6 días en el cargo, pues tan pronto como tomó protesta, le sobrevino el azote del huracán John que dejó varias colonias afectadas y que fueron sus primeras acciones de gobierno, en un recorrido que hizo los primeros días.
Se tiene el dato que en la colonia Plan de Ayala, anunció visitar zonas que colindan con el territorio de un grupo denominado como los Ardillos, pero ya no alcanzó a llegar. Antes despareció de la ruta de recorrido. "Nunca andaba solo, siempre traía un escolta que le acompañaba a todos lados", reveló un funcionario de ese ayuntamiento, no entendemos por qué dicen que andaba solo. Tampoco dijo nada de qué fue de su escolta.
A pesar de que desde la capital del país, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, informó que se reforzaría la seguridad en la capital de Guerrero, lo cierto del caso es que no se ve nada hasta el momento. Nada. La gente camina con miedo y tan pronto como se oculta el sol se van a su casa, para no arriesgarse.
En el Congreso de Guerrero, tampoco se sabe nada de cuándo será el relevo del alcalde suplente, Alarcón Herrera, porque antes tiene que sesionar el cabildo y luego él tiene que ir al recinto legislativo a tomar protesta ante el pleno.
Hasta el momento no hay información de alguna renuncia de los funcionarios del ayuntamiento luego de lo ocurrido. Lo que sí se sabe, es que el suplente va asumir la responsabilidad de gobernar el municipio contra cualquier pronóstico, y es cosa de días para que el cabildo le tome la protesta.
En tanto en redes sociales se publican, una infinidad de versiones sobre la ejecución del alcalde, algunas apuntan a una supuesta reunión con grupos de la delincuencia el punto conocido como el Ocotito a la salida de Chilpancingo. Otros dicen que él fue solo a meterse a la cueva del lobo, porque no quiso ir acompañado de nadie y otros más que fue levantado.
VGB