En apenas 10 días el crimen organizado dejó a la ciudad de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, sin autoridades municipales. Tres de los funcionarios más importantes de la presidencia municipal fueron ejecutados entre el 27 de septiembre y el 6 de octubre y sus cuerpos dejados abandonados en calles céntricas de la ciudad.
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Chilpancingo, así como cientos de municipios en el país renovaron autoridades en las elecciones del pasado 2 de junio. En el caso de la capital guerrerense la morenista Norma Otilia Hernández buscó reelegirse como presidenta municipal. Ella cobró fama por haberse reunido en un restaurante con el líder del grupo criminal "Los Ardillos" ya siendo alcaldesa. En los comicios salió derrotada por su adversario Alejandro Arcos Catalán, quien abanderó a la coalición conformada por el PRI, el PAN y el PRD.
Arcos Catalán tomó posesión el pasado 30 de septiembre, pero la violencia en contra de su equipo de trabajo inició tres días antes de que él asumiera el cargo.
¿Qué funcionarios han sido asesinados en Chilpancingo?
El primero en ser víctima de la violencia fue Ulises Hernández Martínez, quien fue asesinado el pasado 27 de septiembre. Hernández Martínez había sido designado por el entonces virtual alcalde Alejandro Arcos Catalán como el próximo director de Seguridad Pública de Chilpancingo. El hombre se encontraba en la calle cuando un grupo de hombres armados le disparó en varias ocasiones acabando con su vida.
Este hecho dejó consternada a la comunidad de Chilpancingo, ya que el joven de 32 años había sido designado como una figura clave para combatir la inseguridad en la ciudad.
Tan sólo seis días después, Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez, ocupante del cargo de secretario general del Ayuntamiento, fue ejecutado por un grupo de hombres armados en su propio domicilio.
Tapia Gutiérrez, que tenía 45 años de edad, fue atacado mientras se encontraba con su familia, lo que encendió las luces de alerta entre la comunidad y población de Chilpancingo.
¿Cuándo murió el alcalde de Chilpancingo?
El alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue asesinado apenas el domingo 6 de octubre, menos de una semana después de asumir el cargo de presidente municipal.
Su cuerpo fue encontrado decapitado dentro de un vehículo en la colonia Villas del Roble. El macabro asesinato ocurrió en un contexto de creciente violencia en la región, marcada por disputas entre grupos criminales.