HERMOSILLO.- Mariel tiene 17 años de edad, su nombre completo es reservado debido a que es menor de edad, pero a sus pocos años de vida ha tenido que madurar en un ambiente hostil, pues con tan sólo 14 años ella se unió al colectivo “Rastreadoras de Ciudad Obregón”, siendo la integrante más pequeña de esta organización, a ella se le conoce como “La niña rastreadora”, quien este miércoles 22 de noviembre por fin encontró a su hermano desaparecido.
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La niña rastreadora se unió al colectivo para buscar a su hermano José Joel Soto Cervantes, quien desde el 6 de julio de 2019 estaba desaparecido, sus restos fueron encontrados en un predio local.
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El colectivo de rastreadoras informó en redes sociales la noticia y agregó un mensaje solidario para Mariel:
“La espera y la incertidumbre han terminado, por fin regresará a casa, no como todos hubieran querido, pero ya tendrán un lugar para poder llorarle y él descansará” escribió el colectivo.
Mariel le dice adiós a su hermano
Mariel pudo darle el último adiós a su hermano en un funeral muy íntimo y sencillo, donde acudieron las madres buscadoras y que se realizó ayer miércoles, al lugar familiares cercanos y vecinos, quienes trataron de consolar a la menor. La pequeña lloró desconsoladamente abrazando un ataúd gris, mientras algunas personas contaban y trataban de calmarla.
La menor pudo reconocer a su hermano gracias a que se realizó una prueba de ADN tomada de los restos humanos y de ella misma, fue así que los resultados dieron positivo y pudieron darle un merecido descanso a José Joel.
A su hermano lo encontraron en una fosa, primero fue hallado por una constructora quienes tenían planes para construir en un terreno, pero al comenzar a realizar los trabajos metieron una retroexcavadora y al sacar la tierra hallaron los restos humanos.
Un periodo de duelo
Una de las asistentes al velorio y perteneciente a las “Rastreadoras de Ciudad Obregón” dijo:
“Es muy difícil para nosotros estos momentos, porque para los que ya encontramos es revivir, se mueve ese dolor, revives ese día y para los que no han encontrado, pues imagínense, la incertidumbre que sigue” dijo.
En el funeral el colectivo hizo el pase de lista de José Joel y de todas las personas a las que buscan, algunas de las personas rastreadoras rompieron en llanto y posteriormente explicaron que al estar en momentos así es muy triste y recordar el nombre de la persona desaparecida les parte el alma.