CUMBRE DEL G7

Sheinbaum se integra al mundo

Fue una buena decisión la asistencia de la presidenta Claudia Sheinbaum a la cumbre del G7, México se debe involucrar con su máxima capacidad en todos los eventos multilaterales y romper la inercia de López Obrador. | Omar Cepeda

Escrito en OPINIÓN el

Fue una buena decisión la asistencia de la presidenta Claudia Sheinbaum a la cumbre del G7 en Canadá. México se debe involucrar con su máxima capacidad en todos los eventos multilaterales y romper la inercia de López Obrador, quien se ausentó por completo de estos importantes encuentros.

Reconforta ver, entre la pasarela de los principales tomadores de decisiones a gran escala, a nuestra presidenta, sobre todo cuando se abordaron temas que conciernen a la llamada aldea global, desde los esfuerzos para frenar el cambio climático, la economía y la seguridad internacional. La capacidad de persuadir, influir o convencer tras bambalinas es real y absoluta.

La obsolescencia de la ONU ha generado que el multilateralismo en corto, sea el principal recurso para que la diplomacia logre resultados. Es más fácil que en el seno de estas cumbres se tomen decisiones para lograr la paz, por ejemplo, en Ucrania, Gaza o Pakistán, que en las anacrónicas reuniones de septiembre en Nueva York. Tiene razón Trump al pedir que Rusia y China se incorporen en las próximas cumbres del G7.    

Sheinbaum fue muy bien recibida por sus pares de la India, Francia y Canadá; y por supuesto por el incondicional mandatario brasileño Lula da Silva. A nadie deja indiferente la contundencia de su triunfo electoral, y la arquitectura de su movimiento político que la abraza y controla los tres poderes… Para cualquiera de ellos, en sus mejores sueños, lo desearían. 

Por lo pronto, se podría concluir que a Sheinbaum se le vio cómoda, segura y contundente. Estuvo a la altura de un evento de trascendencia y puso el nombre de México donde le corresponde, no sólo como fuerza  regional en América del Norte, también con gran influencia en la vasta región latinoamericana que ha comenzado a ser, más que nunca, un conglomerado de diversas ideologías capaces de inclinar la balanza entre las potencias globales. 

Lamentablemente el presidente de los Estados Unidos abandonó el encuentro antes de tiempo. Argumentó la necesidad de afrontar la agenda bélica en Oriente Medio. Después se confirmó que la mandataria mexicana se comunicó vía telefónica con Donald Trump antes de regresar a México, lo que más o menos recompuso parte de la agenda. 

Para Sheinbaum, el encuentro con Trump era la prioridad número uno, ya que los pendientes con Estados Unidos son urgentes, desde la próxima revisión del TMEC, pasando por el asuntos arancelarios, las redadas contra los migrantes, y la seguridad en las fronteras.

Por ello, es necesario que la cancillería mexicana busque un encuentro cuanto antes, cara a cara, entre Sheinbaum y Trump. La mandataria mexicana debe demostrar que gobernar, va más allá de nuestras fronteras. 

Al mundo lo sacuden varias crisis, pero al mismo tiempo se abren nuevas oportunidades. Al respecto, diversos liderazgos están a la expectativa de, en dónde invertir en desarrollo y crear nuevas sinergias. Apostarán por alguien que asume el bilateralismo y multilateralismo como la llave hacia nuevas rutas. Reunirse con Trump y mostrar en los hechos estar a la misma altura, es una de esas llaves. Esperemos que tome la iniciativa. 

 

Omar Cepeda

@OmarCepedaCastr