PINCHAZOS EN EL METRO

Por una ciudad segura sin pinchazos

La protección de las personas frente a los casos de pinchazos, los cuales han ido en aumento a nivel local, es una tarea conjunta que tiene como único propósito garantizar su derecho a la vida y al libre tránsito. | Tania Larios

Escrito en OPINIÓN el

En la Ciudad de México ha surgido una nueva forma de violencia: los pinchazos. Ataques cometidos por agresores que utilizan agujas o jeringas para inyectar sustancias a las víctimas causando en ellas síntomas como mareo, náuseas y somnolencia, de acuerdo con informes emitidos por las autoridades.

Este tipo de agresiones no sólo ocurren en el centro del país. El Estado de México y Nuevo León también han reportado casos en la materia. Por ello, es urgente combatirlo. 

Estos ataques cometidos con agujas o jeringas con las que se inyectan diferentes tipos de sustancias, sin que hasta el momento se tenga certeza cuáles son, atentan contra la autonomía, la integridad y la seguridad de las personas. 

La sumisión química por pinchazo tiene su origen desde 2021 en otras partes del mundo como Reino Unido, Francia, Alemania, España, Países Bajos y Bélgica. Ante la situación, estos países han generado protocolos de prevención, así como legislaciones que tipifican el delito.  

Mientras tanto, en la Ciudad de México, la Fiscalía capitalina ha reportado la existencia de 68 denuncias por casos de pinchazos, de los cuales se sabe que: 50 ocurrieron en el Metro, 8 en el Metrobús, 6 en la vía pública y 4 en otro tipo de transporte, sin que hasta el momento la situación haya derivado en consecuencias legales.

La sumisión química por pinchazo requiere de la coordinación entre las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México para prevenir, atender y sancionar este tipo de violencia. La falta de tipificación de este delito deja un vacío que obstaculiza su persecución y sanción efectiva. 

Por ello, celebro que la Lic. Clara Marina Brugada Molina, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, se sume a la propuesta que presenté como Coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional ante el Congreso de la Ciudad de México. La iniciativa propone tipificar el delito de sumisión química por pinchazo, con penas de seis meses a cinco años de prisión a quienes, con el objetivo de drogar, debilitar o facilitar delitos como robo o abuso sexual, utilicen agujas o jeringas para inyectar sustancias químicas. El nuevo tipo penal incluye seis agravantes para proteger grupos vulnerables.

La protección de las personas frente a los casos de pinchazos, los cuales han ido en aumento a nivel local, es una tarea conjunta que tiene como único propósito garantizar su derecho a la vida y al libre tránsito.

Tania Larios

@TaniaLariosMX