En los últimos años, en el mundo, la electromovilidad se ha convertido en el estandarte de la lucha contra el cambio climático y la contaminación urbana. Es una gran alternativa para que la movilidad del transporte público utilice energía eléctrica en lugar de combustibles contaminantes y energías fósiles.
En México debe existir un compromiso total con la sostenibilidad y la reducción de emisiones contaminantes, no solo para mejorar la calidad del aire, sino también para modernizar el transporte público en términos de seguridad, eficiencia y creación de nuevas rutas.
Un dato alarmante y revelador es que, en la Ciudad de México, el transporte genera más del 81.2 % de las emisiones contaminantes. Por ello se explica que, de enero a noviembre de 2024, las ventas de autos electrificados tuvieron un crecimiento del 70.2 % en comparación con el año anterior. La transición hacia vehículos eléctricos es una tendencia clave en materia de transición energética y una necesidad urgente.
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En un entorno donde las ciudades mexicanas figuran entre las más contaminadas de América Latina, y donde el transporte representa una de las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero, más que nunca se necesitan políticas públicas eficaces que respondan a la crisis ambiental que viven nuestras ciudades.
En los últimos seis años, las contingencias ambientales por mala calidad del aire se han incrementado. En 2024 se registraron 11 contingencias ambientales y, en el primer trimestre de este 2025, ya se han presentado 6, incluida la del 23 de abril.
Estas contingencias son el resultado de una mala política de movilidad y ambiental.
La activación de las contingencias provoca que la mayoría de la ciudadanía que se desplaza en automóvil se vea afectada en sus traslados, y además, no cuenta con alternativas accesibles o gratuitas.
La electromovilidad en el transporte público es la mejor opción para reducir los contaminantes provenientes de los automóviles y mejorar la calidad del aire.
Con el propósito de promover el uso del transporte público limpio, como coordinadora del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional en el Congreso de la Ciudad de México, presenté una iniciativa de ley para que el transporte de la Red de Movilidad Integrada sea gratuito durante las contingencias ambientales.
La restricción vehicular, durante la activación de la contingencia, propicia que muchas personas opten por utilizar un segundo vehículo, así como taxis o servicios de aplicación, en lugar de contar con medios de movilidad menos contaminantes, como el transporte público que funciona con electricidad.
La reducción de contaminantes requiere medidas adicionales como las propuestas que el PRI en la Ciudad de México ha planteado. La electromovilidad es una de ellas. La transición ha sido lenta, la inversión pública es insuficiente; se necesitan mayores recursos presupuestales y más incentivos para la ciudadanía, con el fin de tener una ciudad sostenible y sustentable, en beneficio de todas y todos.