TEUCHITLÁN

Teuchitlán: versión 4T

Para la 4T Teuchitlán es problema de Jalisco, herramienta de golpeteo, justificante para la invasión y destino idílico maltratado por los medios de comunicación. | Mario Campos

Escrito en OPINIÓN el

Teuchitlán pasará a la historia –al menos al periodismo, que es “el primer borrador de la historia”– como un campo de entrenamiento en el que se reclutaba, torturaba y asesinaba, según el Secretario Harfuch, y que para muchos medios y columnistas alcanzó la dimensión de un campo de exterminio.

Sin embargo, para la 4T la historia es distinta. Con un coro de voces, diversos columnistas, youtuberos y participantes en medios públicos han contado su versión de lo ocurrido, solo que el coro está desafinado pues no hay un solo relato sino varios, aunque todos coinciden en exonerar al gobierno federal.

En uno de los ejes de defensa, el foco de atención debería estar puesto sobre Jalisco y su fiscalía. Es el caso de una de las mesas de canal 11, en la que según su propio anuncio: los asistentes “debatirán sobre las fiscalías estatales que encubren, revictimizan, filtran información (…), inventan verdades históricas y propician impunidad.”

En el mismo sentido, César Huerta, director de Polemón, aseguró que el problema del caso estuvo en la negligencia con la que actuó la Fiscalía de Jalisco aunque denunció que “los medios y especialmente grupos vinculados con la derecha, no tardaron en darle un uso político al horror y bautizaron al lugar como el “Auschwitz mexicano”. 

Frente a eso, el autor afirmó que en el lugar “no hay grandes hornos crematorios como los construidos por los nazis (…) y aún está por comprobarse si los relatos anónimos de los sobrevivientes permitirán localizar una gran fosa clandestina en el lugar o si sólo forman parte de las especulaciones y las mentiras difundidas (…) para golpear al gobierno de Claudia Sheinbaum”. Y es que un común denominador en los relatos aquí citados, es que si hay una víctima en esta historia, es la presidenta.

En la línea de las sospechas se encuentra también la videocolumna de Epigmenio Ibarra que después de explicar que, dado que el objetivo de desaparecer a una persona es no dejar evidencia, “dejar centenares de zapatos en la escena del crimen parece contrario al propósito declarado de la desaparición forzada”, verdad que se refuerza con la invocación a un acto de fe: “la 4T no masacra ni desaparece personas como hizo el viejo régimen y como hace el narco”.

La idea de que ahí no hubo asesinatos masivos y que todo fue una manipulación, se encuentra también entre moneros, como Monero Rapé  o el Monero Hernández y fue ampliada con la visita de periodistas y youtuberos al lugar, que derivó en momentos como la entrevista de Juan Becerra Acosta que preguntó a un reportero si había visto “toneladas de madera, las instalaciones de líneas de gas o las montañas de ceniza que ahí decían que habían”.

En el mismo sentido que algunos de los youtuberos y asiduos a la mañanera que alentados por la presidenta, aseguraron que en el lugar: “no había nada, no alcancé a ver que hubiera algo ahí”, y “no identificamos algún punto en el que hubiera habido algún fuego”.

Este recuento no estaría completo sin dos piezas mas. Por un lado, el relato que asegura que la cobertura es para justificar una invasión de Estados Unidos, relato que empujaron el Fisgón y Fabrizio Mejía, quien aseguró que “el diario Reforma, al llamarle “exterminio” estaba tratando de provocar una reacción para que EU intervenga militarmente en México”.

Finalmente, quizá el caso más… sorpresivo –pues algún adjetivo había que usar– es el de una nota de la televisión pública, que en una entrevista con habitantes de la localidad acusó a los medios de construir la imagen de un lugar violento, cuando de acuerdo a la pieza, el lugar es todo tranquilidad. 

La nota –compartida en redes por Jenaro Viillamil– sostiene que “los habitantes de La Estanzuela, donde se localiza  el Rancho Izaguirre, “defienden la situación y La Paz (sic) de su comunidad frente a la narrativa de varios medios de comunicación”; versión que difundió el noticiero de los medios públicos al presentar el testimonio de un habitante que afirmó: “Aquí vivimos en paz y hago un llamado a toda la gente de otros lados de fuera que vengan y visiten Teuchitlán (…) porque la verdad no es eso que dicen del pueblo (…) gracias a ciertos medios que para mi son chayoteros o amarillista, que la verdad nos han quemado muy feo aquí”.

Así Teuchitlán en el relato 4T: problema de Jalisco, herramienta de golpeteo, justificante para la invasión y destino idílico maltratado por los medios de comunicación.

Mario Campos

@mariocampos