Si usted ronda los 30 años y cuenta con estudios profesionales y trabajo, encaja en el perfil típico de quienes hoy se casan en México. En cambio, si se encuentra casado por más de 21 años, podría ser uno de los tres divorcios anuales que suceden en el país. ¿Felicidades… O no tanto?
Así lo muestran las estadísticas de matrimonios y divorcios para 2024 recientemente publicadas por el INEGI. Según las cifras, el año pasado se registraron 486 mil 645 matrimonios y 161 mil 932 divorcios, es decir, 33.3 separaciones por cada 100 nupcias.
Los resultados muestran algunas tendencias interesantes. Por ejemplo, en la última década, la tasa de matrimonios por cada 100 mil habitantes pasó de 6.9 a 5.4, con una diferencia negativa neta anual cercana a los 80 mil matrimonios. En sentido contrario están los divorcios, que van en ascenso constante. Mientras que en 2015 había 123 mil 883, para 2024 fueron casi 162 mil.
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La gente se casa menos pero, además, tarda más en casarse. Mientras que la edad promedio al momento del matrimonio en 2015 era de 27.9 años para mujeres y de 30.8 años para hombres, en 2024 estos pasaron a 32.1 y 35.0 años, respectivamente. El promedio de las mujeres que se casan con mujeres es 34.7 años, y en hombres son 37.1. En este último caso, el número total de matrimonios de personas de mismo sexo en 2024 fue de 6 mil 312, el 1.3% con respecto a todos los realizados a nivel nacional.
Sobre el perfil de las personas contrayentes, el 28.7% contaba con nivel preparatoria, 28% con estudios profesionales y el 23.8% tenía secundaria. Sin embargo, la tasa de personas con igual escolaridad que contraen matrimonio es mayor para las que tienen estudios profesionales (36.9%), seguido por preparatoria (29.4%) y secundaria (23.5%). En cuanto a la situación de actividad económica, el 94.6% de los hombres declararon realizar alguna al momento de casarse, en comparación con el 57.7% de las mujeres. De ese porcentaje de mujeres que no formaban parte del mercado laboral, el 93% tenía como actividad principal realizar quehaceres del hogar.
En términos comparados, la gente se casa más en Quintana Roo (7.7 matrimonios por cada 100 mil habitantes), Sinaloa (7.1) y Campeche (7.0), mientras que en Puebla, Ciudad de México y Tlaxcala es en donde menos lo hace. En contraste, la mayor tasa de divorcio ocurre también en Campeche (4.89), pero además en Nuevo León (3.52) y Tamaulipas (3.32). La menor tasa de separaciones la tiene el Estado de México (1.21), Chiapas (1.16) y Veracruz (0.91).
De los casi 162 mil divorcios del año pasado, el 45% de ellos habían tenido una duración legal de matrimonio de 16 años o más, y tan solo el grupo de 21 años y más de matrimonio representa el 33.8% del total. En otras palabras: la gente que lleva menos tiempo casada es la que presenta las tasas de separación más altas.
Algo similar sucede con el número de hijos: a menos hijos mayor la tasa de divorcio. De hecho, el 55.1% de las personas que se divorciaron el año pasado no tenían hijo alguno, mientras que las que tenían uno o dos la tasa fue de 22.5 y 16.2%, respectivamente. Solo un 4.8% de las personas con tres hijos se divorció, y 0.6% de quienes tenían cuatro.
Lideran las separaciones el divorcio incausado, es decir, hay una separación por una o ambas partes sin tener que otorgar causa alguna para justificarla. Este representa el 67% del total. En segundo lugar está la separación por mutuo consentimiento (31%), y en tercero la separación del hogar conyugal por más de un año.
Y usted, ¿en cuál estadística cae: próximo casamiento o lejana separación… O al revés?