La violencia política ha sido una característica constante en la historia de Estados Unidos. Desde los asesinatos de figuras públicas como Kennedy o el atentado fallido a Ronald Reagan en los ochenta, hasta la creciente tensión en la era de Donald Trump, ese país parece estar sumido en una espiral de inestabilidad violenta y exceso de armas.
Es preocupante cómo la facilidad de acceso a armamento ha contribuido a esta cultura de violencia. Los ciudadanos estadounidenses parecen acostumbrados a vivir con este miedo constante, lo cual habla de un problema sistémico que requiere una solución integral.
Es imperativo que Estados Unidos aborde esta crisis de violencia política de manera urgente y efectiva, antes de que se sigan repitiendo estos trágicos eventos que manchan la imagen del país a nivel internacional.
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Todavía no alcanzamos a medir las repercusiones del fallido atentado contra Donald Trump.
Un joven llamado Thomas Matthew Crooks, de 20 años, fue quien intentó asesinar a Trump. El tirador disparó a Trump desde una distancia de 140 metros con una AR-15 de su padre y milagrosamente falló. Lee Harvey Oswald le disparó a John F. Kennedy en 1963 desde una distancia de 81 metros y todos conocemos el resultado. Más allá de las posibles fallas del Servicio Secreto y sus errores, no olvidemos que en Estados Unidos hay 120 armas por cada estadounidense, nuestro vecino del norte es la nación con más número de armas que ciudadanos; y al parecer a nadie le sorprendió que un chico de 20 años comprara ese día 200 municiones en un Home Depot y una escalera que finalmente usó para el atentado. Así sus alertas.
Apenas en diciembre de 2023, el Senado votó para prohibir la venta de AR-15, los republicanos se opusieron, siete meses después su candidato presidencial fue atacado con esa misma arma.
Y en medio de este caos y adrenalina, un fotógrafo de primera línea hace la imagen que aquí les presento y que le da la vuelta al mundo. Se trata de Evan Vucci, fotógrafo de la AP que ganó en 2021 el premio Pulitzer y es conocido por su cobertura de las protestas tras el asesinato de George Floyd. Vive en Washington y cubre la campaña de Trump.
El día del atentado, -sábado 13 de Julio- Vucci nos demostró su talento, profesionalismo y serenidad para hacer esta foto. Hoy su imagen esta en playeras, termos, calcomanías y tatuajes.
El fotoperiodista y colega Evan Vucci, en su cobertura del atentado, demostró un notable profesionalismo y serenidad, logrando capturar una imagen impactante que trasciende el mero registro periodístico. Su talento y capacidad de composición en momentos de alta tensión son dignos de reconocimiento.
La fotografía de Trump realizada por Vucci captura más que un simple momento; refleja el poder, la tensión y la vulnerabilidad que rodean a un líder en tiempos de crisis. La composición triangular coloca a Trump como figura central, elevado y protegido por sus guardaespaldas. Aunque la situación puede parecer fría y distante, el talento del fotógrafo ha sabido aprovechar esta oportunidad para crear una imagen impactante y llena de significado. Esta fotografía nos recuerda que incluso en los momentos más difíciles, los verdaderos profesionales pueden encontrar la inspiración y transformar lo ordinario en extraordinario.
Obvio, los argumentos al bote pronto de ciertos periodistas que hablaban de un “posible montaje” quedaron enterrados en el olvido. Independientemente de todo, las encuestas subieron a favor de Trump y me parece que la elección norteamericana se definió ese día.