#POLÍTICAMENTE

Adán Augusto vs. Monreal

Morena y la presidenta no necesitan que sus dos líderes legislativos se desgasten y creen división en el partido, la agenda es lo suficientemente complicada como para invertir tiempo en lidiar con caprichos, venganzas y señalamientos. | Guillermo Sesma

Escrito en OPINIÓN el

La política mexicana es un campo de rivalidades internas, alianzas frágiles y confrontaciones que, aunque inesperadas, son el reflejo de las pugnas en busca de poder e influencia, muchas veces aderezada con un poco de resentimiento y venganza.

El que podría ser el primer desencuentro del Segundo Piso de la Cuarta Transformación fue protagonizado por Adán Augusto López, Coordinador de la Fracción Parlamentaria de MORENA en el Senado de la República y Ricardo Monreal, quien también es Coordinador Parlamentario de MORENA, pero en la Cámara de Diputados

Lo que sabemos hasta el momento es que la Cámara de diputados aprobó un recorte de 123 millones de pesos al presupuesto del Senado para 2025, lo que provocó, al parecer, la airada reacción de Adán Augusto López, quien es presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República. 

Si bien es cierto que inició su discurso diciendo que entendía que el recorte respondía a la política de austeridad y que dichos recursos serían invertidos en programas prioritarios para la ciudadanía, no tardó en hacer señalamientos directos sobre investigaciones y denuncias sobre dos empresas, una de elevadores y otra que lleva a la administración del archivo del Senado de la República, quienes tenían contratos por 90 y 60 millones de pesos respectivamente. Dichas investigaciones apuntan a Ricardo Monreal, pues no hay que olvidar que él era el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República en la legislatura pasada.  

La reacción de Ricardo Monreal no se hizo esperar, negó rotundamente las irregularidades, compartió una copia de los contratos con las empresas y mencionó que su gestión había sido auditada en 77 ocasiones. Señaló que eran infundios lo dicho por Adán Augusto y era necesario hacer algunas precisiones.   

Hagamos un poco de historia, esta no es la primera vez que un gobierno que recién se estrena enfrenta pugnas internas, basta con recordar la difícil relación que mantuvieron Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación y Luis Videgaray, Secretario de Hacienda durante la administración de Enrique Peña Nieto. El pleito entre estos dos personajes desgastó y polarizó al gabinete peñanietista y en más de una ocasión el mismo Presidente de la República tuvo que intervenir para calmar las aguas. 

Hoy somos nuevamente testigos de cómo las peleas cupulares y personales nada abonan a la vida pública nacional, no fortalecen al gobierno y no crean cohesión en los partidos. Que ambos coordinadores parlamentarios dediquen su tiempo a un pleito sin futuro, condicionará los resultados en la labor que desempeñan como representantes ciudadanos y líderes partidistas. Si a esto sumamos que tanto Adán como Monreal sumaron a sus respectivas bancadas a esta lucha de poderes, la inoperancia legislativa se asoma por la puerta.

MORENA y la presidenta Claudia Sheinbaum no necesitan que sus dos líderes legislativos se desgasten y creen división en el partido, la agenda es lo suficientemente complicada como para invertir tiempo valioso en lidiar con caprichos, venganzas y señalamientos. 

El jalón de orejas para Adán Augusto López y Ricardo Monreal está por venir, un gobierno que no ha completado 100 días de gestión no se puede permitir estar en boca de todos por un jaloneo entre políticos en los que descansa tanta responsabilidad.

Guillermo Sesma

@gsesma