En las últimas horas se ha soltado el rumor de la muerte de Nemesio Oseguera Cervantes conocido como el Señor de los Gallos o “El Mencho”, ya que el cantante Ricardo Lobo publicó un corrido cuyo título es “Ya se fue”, donde hace referencia al líder criminal y fundador del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El posible fallecimiento de “El Mencho” ha puesto en alerta a diferentes autoridades federales y de Estados Unidos, ya que el CJNG es considerado una de las cinco estructuras criminales más poderosas a nivel mundial, con poco más de 45 mil efectivos y con una valor estimado en más de 22 mil millones de dólares. Sus alcances van más allá de nuestro país, tiene presencia en 102 países a nivel mundial de acuerdo con el informe realizado por la directora de la DEA Annie Milgran.
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De ser cierto el fallecimiento de Nemesio Oseguera Cervantes el Señor de los Gallos o “El Mencho”, la preocupación de las autoridades va directamente a las posibles repercusiones que se darían al interior del cártel. Se tiene la experiencia de lo que sucedió con el cártel de Golfo al ser detenido y posteriormente extraditado Osiel Cárdenas Guillen, alias “El Patrón” o el “Mata Amigos”, que dio como resultado un rompimiento al interior del cártel del Golfo y el empoderamiento de los Zetas. Cuando los zetas se separaron del cártel del Golfo para operar como un grupo criminal independiente, la violencia en México y algunos otros países sufrieron la consecuencia de esa guerra, por lo que las autoridades se están preparando para evitar una situación parecida a lo acontecido a principios del año 2000, con los zetas y el cártel del Golfo.
Se sabe desde hace años, de acuerdo a los informes de inteligencia militar y del extinto CISEN ahora CNI, que Nemesio Oseguera Cervantes sufre de problemas de salud, por lo que se tiene documentado que es sometido frecuentemente a diálisis, al grado de construir un hospital en la sierra entre Jalisco y Michoacán para ser atendido de los padecimientos. Pero ¿por qué preocupa la sucesión de poder en el CJNG? La respuesta es fácil, ya que el sucesor natural sería su hijo Rubén Oseguera González, pero recordemos que fue detenido y extraditado a Estados Unidos en el año 2020, lo que abre la puerta a diferentes perfiles que tienen la capacidad y el liderazgo para intentar tomar el control del cártel. Hay que recordar cómo fueron los orígenes del CJNG, mismo que viene de lo que en su momento era el cártel de Milenio con los Valencia que trabajaban con Nacho Coronel, padre de la esposa de “El Chapo” Guzmán y de los Amezcua Contreras líderes del cártel de Colima, de los mismos Cuinis y la forma como terminó tomando el control “El Mencho”, convirtiendo en pocos años al CJNG como uno de los principales grupos criminales del mundo.
Dentro de los posibles sucesores del Señor de los Gallos se mencionan tres nombres, que son Ricardo Ruiz Velazco el “RR” o el “Tripa”, Hugo Gonzalo Mendoza Gaytan alias “el sapo” o “rey sapo” y a quien se le atribuye el asesinato del ex gobernador priista Aristóteles Sandoval; y Audias Flores Silva alias “el Jardinero” aquel que se le peló a la Marina el 22 de noviembre de este año en un lujoso condominio en Zapopan, Jalisco. Pero existe un cuarto nombre que no se ha mencionado mucho, pero que de acuerdo a los informes de las áreas de inteligencia de la SEDENA y SEMAR podría tener relevancia en la posible sucesión del cártel y que es Juan Carlos Valencia González, hijastro de “El Mencho” y conocido como el 03 o el JPL. Se tiene conocimiento que sería uno de los más apoyados por la familia de su madre y todo el clan de los Valencia, quien de acuerdo a las autoridades de México y Estados Unidos serían quienes han estado realizando alianzas para tomar el control del cártel, en especial con el “RR” con quien tiene una amistad de varios años.
Por todo esto es que el gobierno de México y Estados Unidos, están trabajando de forma coordinada en los posibles escenarios que podrían suponer la muerte de Nemesio Oseguera Cervantes conocido como el Señor de los Gallos o “El Mencho”. Las repercusiones que traería una lucha interna por el control de esta organización criminal podría traer violencia que afectaría a ambos países.
Por último, no puedo dejar de mencionar lo sucedido en Texcapilla, municipio de Texcaltitlán, Estado de México, donde sus pobladores se enfrentaron con integrantes del crimen organizado pertenecientes a la familia michoacana, quienes les exigían el pago de dinero por cada metro de siembra que realizaran, dejando un saldo oficial de 14 muertos, 11 del grupo criminal y 3 de los pobladores. No puede pasar desapercibido que esto es consecuencia del hartazgo de la sociedad civil de las diferentes comunidades. Es sabido y de conocimiento público que durante años existió un entendimiento entre los diferentes grupos criminales y las autoridades estatales y municipales, que por obvias razones al haber un cambio de gobierno a nivel estatal, esos acuerdos dejaron de existir y por consiguiente vienen los reacomodos en las estructuras criminales. La solicitud que realiza el gobierno del estado a la participación de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano es un claro ejemplo de que los pactos criminales en el Estado de México ya no serán permitidos, por lo menos no los que tenían los anteriores gobernantes.
Será importante el actuar, a partir de ahora, del secretario de seguridad estatal Andrés Felipe Téllez, quien tiene menos de tres meses en el puesto y a quien ubico más como abogado penalista postulante que como especialista en seguridad pública. Sin embargo, por lo menos ante los hechos sucedidos en Texcaltitlán ha sido responsable y ha tomado las precauciones necesarias para evitar mayor violencia en la región, situación que no puedo decir sobre el Fiscal General del estado José Luis Cervantes Martínez, quien sí conoce la radiografía criminal del estado y que tenía la información del grupo criminal, del líder de esa región y que lo ubica como uno de los objetivos prioritarios de esa fiscalía, por lo que sí tiene responsabilidad de lo sucedido en esa región del estado, por lo menor por omisión.