El jueves cinco de octubre se realizó la reunión de alto nivel entre los funcionarios de alto nivel de Estados Unidos y sus pares mexicanos, el secretario de Estado, Antony Blinken, el de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y el fiscal general, Merrick Garland, con la firme intención de trabajar de forma conjunta con el gobierno mexicano para detener la entrada de drogas a territorio norteamericano en específico del fentanilo. Este tema es la principal preocupación del gobierno norteamericano, dicha sustancia ha causado un problema grave de salud pública y de seguridad en todo el país.
El tono de los participantes fue mesurado y de respeto, aunque cada uno manifestó sus preocupaciones en el tema, ya que el gobierno de Estados Unidos sigue enfatizando que son los cárteles mexicanos, haciendo referencia al Cártel de Sinaloa y el CJNG quienes introducen de forma ilegal dicha sustancia a territorio norteamericano. Por su parte, el gobierno mexicano sigue defendiendo la postura de que en nuestro país no se produce ni se tiene posibilidad de contar con la materia prima para producir el fentanilo, y que dichos precursores químicos son fabricados en países asiáticos. Aun así, ambos países reconocieron que muchos de estos precursores también son enviados de forma directa a nuestro vecino del norte sin pasar por nuestro país.
Te podría interesar
Se tuvo el entendimiento que mediante la cooperación que se ha realizado en los últimos meses se han tenido buenos resultados en el decomiso de fentanilo y de precursores químicos en ambos países. Asimismo, ésta es una de las pocas veces que el gobierno norteamericano reconoce que los cárteles de la droga mexicanos introducen de forma ilegal el fentanilo a Estados Unidos para ser trasladados por sus socios norteamericanos en su territorio, situación pocas veces reconocida.
El segundo tema y no de menor importancia fue la migración ilegal hacia Estados Unidos. México nuevamente tendrá que procesar las solicitudes migratorias en el sur de nuestro país, donde los inmigrantes podrán solicitar refugio en el vecino país del norte como refugiados. Mientras permanecerán en territorio mexicano, en tanto se estudian las solicitudes, lo que genera de nuevo una obligación a nuestro país para ser de facto el muro legal que frene la migración ilegal.
La postura de México es la misma que todas aquellas personas que migran: no lo hacen por gusto sino por necesidad, por lo que se debe apoyar el desarrollo en los países de origen para frenar la migración.
Por su parte, el gobierno mexicano nuevamente hizo hincapié que para que la violencia y el empoderamiento de los grupos criminales en nuestro país se pueda seguir realizando, se necesita forzosamente el compromiso de las autoridades norteamericanas en el tráfico ilícito de armas de fuego a nuestro país. De seguir teniendo la facilidad que tienen los grupo criminales de comprar armas de fuego en territorio norteamericano y contrabandearlas de forma ilegal a México, les da una capacidad de fuego que supera a las autoridades policiacas, Así lo hemos podido observar con el arma xm214 ametralladora de cañón rotativo, calibre 5.56 mm, conocida como Microgun, tiene la capacidad de disparar hasta 10 mil rondas por minuto y no podría ser adquirida por un grupo criminal mexicano a menos que existiera contubernio de autoridades de Estados Unidos.
La reunión finalizó con una fotografía de ambas delegaciones y los acuerdos que la administración Biden buscaba en estos tiempos políticos de acoso por parte del partido republicano, el cual amenaza con mandar al ejército norteamericano a atacar a los cárteles de la droga en territorio mexicano.
Por último, es importante señalar que el gobierno de Estados Unidos de Norteamérica por primera vez reconoce tener un problema de consumo de drogas, y que existen grupos de narcotraficantes en su territorio. De igual manera que los cárteles de las drogas tienen laboratorios en territorio norteamericano y que importan la materia prima de forma directa desde países de Asia. Aun así sigue manifestando que gran parte de las drogas sintéticas como el fentanilo ingresan de forma ilegal por territorio mexicano, por lo que pide apoyo de sus pares mexicanos, reconociendo el esfuerzo del Ejército, Armada de México, Guardia Nacional y Fiscalía General de la República.
La reunión fue buena en términos políticos y generales, lo que le da una bocanada de aire fresco a la administración Biden para defenderse de la retórica de los republicanos que todos los días lo atacan con este tema, y prometen invadir a México haciendo uso del Ejército norteamericano para acabar con los cárteles de la droga mexicanos, a los cuales califican de terroristas.