#RECOVECOS

AMLO ¿”entrometido” con el Poder Judicial? ¿Y el pueblo?

El presidente López Obrador no quiere quitar privilegios al Poder Judicial, es una venganza. | Jorge Ramos Pérez

Créditos: #OpiniónLSR
Escrito en OPINIÓN el

El presidente Andrés Manuel López Obrador recibió su constancia como presidente electo el 8 de agosto de 2018 en la sede del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y ahí afirmó lo siguiente:

“Ofrezco a ustedes, señoras y señores magistrados, así como al resto del Poder Judicial, a los legisladores y a todos los integrantes de los órganos autónomos del Estado, que no habré de entrometerme de manera alguna en las resoluciones que únicamente a ustedes competen”.

Hoy estamos viendo un choque frontal entre el presidente López Obrador y el Poder Judicial. Está empeñado en acabar con 13 de 14 fideicomisos que abarcan a la Corte, al Tribunal Electoral y al Consejo de la Judicatura Federal, que en suma superan los 21 mil millones de pesos, pero que los incluidos en la reforma en el Congreso suma alrededor de 15 mil millones de pesos.

El presidente insiste en que no afectará a los trabajadores del Poder Judicial, que en realidad busca acabar con “privilegios” de ministros.

Manuel Fuentes, compañero de la sección Opinión en La Silla Rota, ha explicado que un sindicato aglutina 40 mil trabajadores de los órganos jurisdiccionales, con un 51.44% de mujeres y 48.56% de hombres. Un segundo sindicato integra a más 14 mil 386 empleados de los órganos y unidades administrativas compuesto por un 54.31% de hombres y 45.69% de mujeres y hasta donde se sabe se trata del personal de más bajos ingresos.

Cientos, quizá miles de ellos, han salido a las calles a encarar al presidente López Obrador y le han dicho que trabajan muchas horas y tampoco es que naden en dinero o privilegios.

En diciembre de 2018, apenas a 12 días de iniciado el sexenio, en La Silla Rota documentamos varias situaciones en el Poder Judicial. Una de ellas fue la existencia de 345 casas propiedad del Poder Judicial, una de ellas, la más cara, tenía un valor de poco más de 6 millones de pesos (Les ponen casas de hasta 6 mdp a jueces | La Silla Rota). Otro elemento que se detalló fue el claro nepotismo de jueces y magistrados: el 51 por ciento de los jueces y magistrados tenían un familiar trabajando en el Poder Judicial. Se documentaron casos específicos que eran un escándalo (Consejo de la Judicatura documenta nepotismo en el Poder Judicial | La Silla Rota).

Por ejemplo, los familiares del magistrado José Marino Quistián Espericueta cobraban 5 millones 134 mil 440 pesos. En su caso, él gana 167 mil 448 pesos al mes. Y así el paseo por entidades como San Luís Potosí, Estado de México, Puebla. Todo documentado por el propio Consejo de la Judicatura Federal en documentos que obtuvo La Silla Rota en 2018.

¿Hay ángeles y querubines en el Poder Judicial? No. Y al parecer eso lo tienen claro. Con los años, fuentes judiciales confirmaron a esta columna que no pudieron hacer nada en contra del nepotismo. Y en cuanto a la “Inmobiliaria Poder Judicial” la explicación es que se trata de casas en donde se alojan jueces o magistrados que son cambiados de estado, por lo que se quedan sin posibilidad de tener donde asentarse con su familia.

Sin duda, los problemas del Poder Judicial no son solo estos. Lentitud en la ejecución de sentencias, miles de personas que tienen años y a veces hasta décadas en espera de una resolución judicial que los convierta en culpables o inocentes. También la existencia de manos poderosas que mueven hilos para delinear decisiones de jueces y magistrados, de lo cual algo podría saber Arturo Zaldívar, el más fiel escudero del presidente López Obrador.

Si el presidente de México cumplió o no su palabra de agosto de 2018 es lo de menos. Lo cierto es que el presidente no quiere quitar privilegios, es una venganza. Si de verdad quisiera hacer algo por la justicia debería empezar por el principio: desde la investigación de los casos, la procuración de justicia en las fiscalías y luego el último paso, los procesos judiciales y la aplicación de la justicia. Pero no. Lo que hace es politizar. El sexenio ya se acabó y su cruzada contra los fideicomisos fracasará, pero le servirá de pasto seco para seguir echando fuego político. Y mientras tanto el pueblo que tanto dice defender, que se joda.

Punto y aparte. En la recta final por la sucesión en la UNAM todo parece estar ya dispuesto. En dos semanas habrá humo blanco. 

Punto final. Ernestina Godoy se reelegirá como fiscal de la CDMX. Una primera fecha fatal es el 30 de octubre. Pero pasará a como dé lugar… incluidos los votos de opositores y doblegar a los propios que se resisten.

 

Jorge Ramos Pérez

@jorgeramos7773