La Sociedad Internacional de Cirugía Estética Plástica (ISAP por sus siglas en inglés) publicó en 2022 los resultados de su encuesta sobre procedimientos estéticos realizados en el mundo. El país en donde más procedimientos se realizaron fue Estados Unidos (7,448,196) seguido por Brasil y Japón. En cuarto lugar se encuentra México con 1,693,325 procedimientos al año. Los procedimientos quirúrgicos más común reportados en México fueron la liposucción (136.218) seguido por la mamoplastía de aumento (103,524) y el aumento de glúteos (95,521).
La enorme demanda de procedimientos y el reducido número de cirujanos especialistas en la materia han hecho que surja, en nuestro país, un número importante de estafadores y clínicas patito. La legislación actual es clara: sólo pueden realizar cirugías plásticas y estéticas los médicos que cuenten con la especialidad en la materia y la certificación vigente. Esto tiene su razón de ser. La cirugía plástica y estética es compleja y requiere de una empinada curva de aprendizaje para poder dominarla. No sólo es saber realizar los procedimientos, también detectar las complicaciones y atenderlas de manera oportuna. A pesar de esto, nos encontramos con un gran número de personas que no cumplen con estos requisitos y realizan cirugías causando enormes daños a sus pacientes.
Los buenos hospitales privados tienen criterios para seleccionar quienes pueden realizar cirugías en sus instalaciones. Por lo tanto, al no poder acceder a estos hospitales, los charlatanes han creado clínicas patito en donde pueden hacer lo que quieran. El gancho: son mucho más baratas. Pero, recuerden, cada peso que se ahorran en una cirugía estética es un aumento en el riesgo de que se presente una complicación. La buena cirugía estética es cara no por codicia del personal de salud, sino que para realizar una atención de calidad es necesario un equipo de profesionales de salud y auxiliares. Además de contar con las instalaciones adecuadas para poder prevenir complicaciones y, en caso de presentarse, detectarlas tempranamente y tratarlas. Muchas clínicas patito no tienen siquiera quirófanos, son sólo cuartos improvisados en donde operan a sus pacientes en condiciones insalubres y sin prevenir ninguna medida en caso de complicación. No hablemos de buenos equipos de anestesia, personal de enfermería capacitado, banco de sangre o Terapia Intensiva.
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Mi consejo para las personas que se van a someter a estos procedimientos es que siempre le pidan al médico que les muestre su título de cirujano plástico y su certificado vigente. Ningún médico honesto se va a ofender por esto, incluso se va a sentir orgulloso de poder contarle a su paciente todos los años de estudio y lo que le costó llegar a donde está. Si su médico se niega a darle esa información o se ofende por la pregunta es mejor dejar el consultorio en ese momento. Recuerde: nadie puede realizar cirugías estéticas si no cuenta con la especialidad en cirugía plástica. Los diplomados y las maestrías no son sustitutos de la especialidad en cirugía plástica. En caso de dudas, cualquier persona puede consultar en la página del Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (https://cmcper.org.mx/) si el médico que lo va a atender cuenta con las credenciales e, incluso, se pueden realizar búsquedas por Estado para saber quiénes son los cirujanos plásticos certificados en cada Entidad Federativa. No vaya con médicos “famosos”, acuda con médicos especialistas certificados.
En 2022, la periodista Eréndira Aquino publicó un reportaje sobre cirugías estéticas mal realizadas y los daños ocasionados por estas a la vida de mujeres transgénero. Ahí narra algunas experiencias de las 300 mujeres trans que son atenidas por médicos de la asociación civil Brigada Callejera Elisa Martínez por diversos daños ocasionados por procedimientos estéticos.
En su reportaje hace alusión a una víctima de Miriam Yukie Gaona, apodada “la Matabellas”, quien fuera detenida en 2002 por diversos delitos, ya que se hacía pasar por cirujana plástica y ocasionaba enormes daños a las personas que acudían con ella ya que les inyectaba sustancias y realizaba procedimientos sin contar con conocimientos médicos. En otro reportaje, se menciona que existieron al menos 100 denuncias en su contra y se le condenó a 18 años de prisión, pero fue liberada en 2014 sin cumplir la totalidad de su condena.
El caso de Mirian Yukie Gaona no es el único. Actualmente existen muchas personas que se hacen pasar por cirujanos plásticos sin contar con la especialidad y generan enormes daños a la población. Es importante mencionar que estas personas no se esconden. Incluso salen en programas de televisión y se anuncian en internet. En mi caso, como médico y abogado, he llevado varios juicios relacionados a personas que no cuentan con la especialidad o, incluso, que no tienen siquiera el título de médico general. Poder ganar uno de estos casos lleva, en ocasiones, varios años; además, de que los daños generados por un procedimiento estético mal realizado son devastadores. Es mejor prevenir e informarse antes de someterse a uno de estos procedimientos. Una de las cargas más importantes en los pacientes que sufren estas situaciones es el sentimiento de culpa por no preguntar e informarse antes. Pregunten e infórmense.
Ahora, cuando hablamos de clínicas “patito” nos referimos a aquellas que no cuentan con licencia sanitaria para llevar a cabo cirugías. Para darnos una idea de cuántas clínicas realizan procedimientos estéticos, en 2018 COFEPRIS emitió una alerta sanitaria con relación a Clínicas de Cirugía Estética Irregulares. Ahí reportó que había verificado 4,446 clínicas que prestaban estos servicios, identificando anomalías en 529 y suspendiendo actividades de 277. Para darnos una idea de qué tan grande es el problema, debemos pensar que el IMSS cuenta con un poco más de 6,500 unidades de Medicina Familiar en el país. De ahí la dificultad de poder verificarlas y mantenerlas en orden. Simplemente son demasiadas y el negocio es muy grande. Sólo hace falta buscar en Google: “muerte en cirugía estética” para darnos cuenta de la alarmante cantidad de personas que fallecen en nuestro país por realizarse este tipo de procedimientos en una clínica patito con un charlatán.
Así como debemos de preguntarle al médico por sus credenciales y revisar que su nombre aparezca en la página del Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva. También, debemos de conocer el lugar en donde nos van a realizar la cirugía. En la mayoría de las ocasiones, las personas conocen la clínica el día de la cirugía y, a pesar de que notan que el lugar no está bien, se someten al procedimiento “porque ya están ahí”. Yo les recomiendo que vayan días antes y vean las instalaciones. Incluso que lo busquen en internet. Créanme, en el 90% de las veces se van a dar cuenta que es una clínica patito al ver las instalaciones. Pueden solicitar que les muestren la licencia sanitaria, pero no siempre es fácil saber si el documento que nos muestran es auténtico. Lo que sí podemos observar es la higiene y la atención del personal. Si una clínica tiene su sala de esperas sucia, lo más seguro es que así esté su quirófano. Una de las causas más frecuentes de complicaciones en estos procedimientos son las infecciones y cuando nos toca ir a juicio por alguna complicación, nos damos cuenta que las clínicas patito no cuentan con protocolos para evitar que se presenten infecciones. Simplemente no les importa.
Otro factor a tomar en cuenta es la calidad de la atención. Si la clínica se ve abandonada, sin personal. Lo más seguro es que después de tu cirugía vaya a estar así, sin alguien que esté pendiente de tus síntomas y tu recuperación. Algo que hace costosa la atención en salud es contratar el personal suficiente. Por supuesto que las clínicas patito pueden ofrecer costos muy bajos porque no contratan al personal suficiente.
Para concluir, diré que la cirugía estética no es barata. No sólo por la complejidad de los procedimientos, sino también por los costos de mantener un hospital en buenas condiciones y con el personal suficiente y adecuado. Si el precio de su procedimiento parece demasiado bueno para ser verdad, yo le recomiendo que revise quién lo va a operar y en dónde. Generalmente ese ahorro económico repercutirá en la atención que va a recibir en caso de que se presente una complicación. Toda cirugía tiene sus riesgos, pero realizar las cirugías en buenos hospitales, con médicos especialistas nos ayuda a disminuirlos y darle una atención oportuna a las complicaciones, si estas se presentan.
Si usted conoce alguna clínica irregular o ha sido víctima puede realizar una denuncia en línea de manera gratuita a través del portal de COFEPRIS en la siguiente liga: https://www.gob.mx/cofepris/acciones-y-programas/denuncias-sanitarias