El 25 de noviembre de 2021 el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo en una conferencia que en su gobierno se iban a distribuir los medicamentos hasta los pueblos más apartados, que no iban a faltar o se dejaba de llamar Andrés Manuel.
Hasta el día de hoy no se han distribuido dichos medicamentos y tampoco el Presidente se ha dejado de llamar Andrés Manuel; pero la pregunta más importante es: ¿Cómo vamos con la distribución de medicamentos?
Hablé con el doctor Andrés Castañeda Prado, quien es Coordinador de las causas de salud y bienestar en Nosotrxs (movimiento para combatir la desigualdad y la corrupción). Desde Nosotrxs se impulsa al Colectivo Cero Desabasto, que tiene como objetivo aglutinar reportes con relación al desabasto de medicamentos y crear información sobre el problema.
El doctor Castañeda es muy franco cuando habla sobre el tema del desabasto. Me comentó que este problema no inició con el actual gobierno, ya existía, pero a partir de 2019 se ha visto un aumento pronunciado en el desabasto de medicamentos. Por lo que, en cuestiones de abasto de medicamentos, parece ser que este ha sido un sexenio perdido. Estamos peor que antes.
Es relativamente fácil hablar sobre cifras, estadísticas y número de recetas no surtidas, pero detrás de cada uno de estos números tenemos que reconocer que un niño fallece por no recibir atención médica o una mujer con cáncer de mama pierde años de vida al no recibir su quimioterapia de manera oportuna. El desabasto de medicamentos es un tema complicado y técnico, pero también cuenta la historia del desastre que se vive en nuestro sistema de salud. A mi no me preocupa que el Presidente pierda su nombre por no poder solucionar el problema, me preocupa el enorme sufrimiento que se está causando a la población. Cada receta no surtida, cada tratamiento postergado es una tragedia.
En la página de internet de cero desabasto se encuentra mucha información sobre cómo se reporta y estudia el fenómeno del desabasto en México. En estos años han recibido más de diez mil reportes de personas quejándose por el desabasto de medicamentos de todos los estados del país. Como podemos observar de la información que nos brinda el colectivo, el problema del desabasto no es igual en todo el país y dependiendo del cuatrimestre que se reporta algunos estados están mejor y otros peor. El desabasto es un problema muy complejo que debe de resolverse con cooperación y no con luchas partidistas e ideológicas.
En 2020, Cero Desabasto publicó un informe titulado: “Mapeando el desabasto en México”. Ahí se reconoce que el 2020 fue un año difícil y atípico por el problema que significaba la pandemia de covid-19. En dicho documento se informa de los datos recolectados correspondientes a 2019 y 2020 el paciente más afectado por el desabasto fue el paciente con cáncer, seguido por el paciente con diabetes. Preocupa también que en cuarto lugar se encuentran aquellos pacientes que viven con VIH. Como es de esperar, el desabasto afecta a todos, pero predominantemente a los más vulnerables. A aquellos que dejan de recibir una sola dosis en tiempo y forma puede cambiar el resultado y las expectativas de su tratamiento.
Por otra parte, se menciona que el 5% de los reportes de desabasto de 2019 y 2020 corresponden a insulina. Medicamento fundamental para el tratamiento de pacientes con diabetes.
Otro resultado que llama la atención es que de enero a diciembre de 2020 se reporta que 4 de cada 10 personas consideran que hubo corrupción con relación a su caso de desabasto. Esta no es una estadística que debe ser tomada a la ligera, ya que la corrupción es uno de los factores que generan el desabasto. No estamos seguros en qué medida; pero, por supuesto que es parte del problema. Ahora, la población, cuando no recibe sus medicamentos, no analiza la cadena de producción y distribución; más bien, se hacen a la idea de que probablemente su medicamento no llega debido a algún acto de corrupción. Por lo tanto, el desabasto también contribuye a minar el estado de derecho y la confianza de la población en nuestras instituciones y autoridades.
Un último dato que daré sobre el informe es que la Ciudad de México, Estado de México, Chihuahua, Jalisco, Nuevo León y Veracruz representan el 55% de los reportes de desabasto. Es probable que esto se deba a la enorme población que vive en dichas entidades, pero nos da una idea de que el desabasto no es un problema de comunidades remotas, sino que también se presenta en los grandes centros urbanos de nuestro país. El desabasto está presente en toda la República Mexicana
Sobre la información publicada por el gobierno con relación a este problema el doctor Castañeda me refiere a la plataforma de indicadores de la Secretaría de Salud. La cual, entre sus indicadores reporta el relativo al surtimiento completo de medicamentos. El cual –me advierte el doctor Castañeda_ es un instrumento diseñado para una función en específico: medir el surtimiento completo de medicamentos, lo cual no es igual al desabasto.
Cuando analizamos dicho indicador nos percatamos que para el primer cuatrimestre del año la Ciudad de México tuvo el mayor surtimiento de medicamentos (87.3%) y Chihuahua tuvo el más bajo (43.5%). La diferencia es enorme. Me parece que es imposible lograr un surtimiento completo de medicamentos, pero el 43.5% parece algo alarmante. Otras entidades que muestran resultados similares son Oaxaca con 50.2%, Hidalgo con 51.9%, Quintana Roo con 53.6% y Guerrero con 54%.
Algunas conclusiones del doctor Castañeda son que es innegable que existe desabasto. También, que el fenómeno no inició con el actual gobierno, pero que en estos años no hemos logrado recuperar los números que teníamos en 2018. Al parecer se han intentado diversos medios y estrategias para lograr superar este problema, pero estos no han sido efectivos y nos encontramos que para el 2024, se va a cambiar la estrategia y, por lo tanto, parece ser que el desabasto no va a desaparecer en un futuro cercano.
Es probable que el desabasto no sólo deje sin nombre a nuestro presidente, también va a costarle la vida a muchos mexicanos. En este gobierno se han intentado diversas estrategias, pero todas han fallado y, hoy por hoy, estamos peor que al inicio del sexenio.
Si alguien quiere realizar un reporte sobre desabasto de alguna receta o medicamento lo puede hacer sin costo a través de la página de internet del movimiento Cero Desabasto: