Durante mayo de 2025, la confianza de los hogares mexicanos mostró una ligera recuperación. De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y el Banco de México, el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) se ubicó en 46.7 puntos, lo que representa un avance mensual de 1.2 puntos, en cifras desestacionalizadas. Este es su mejor nivel en lo que va del año.
Sin embargo, al comparar el resultado con el mismo mes del año anterior, se observa un retroceso: en mayo de 2024, el ICC alcanzó 46.9 puntos, es decir, 0.2 puntos más que el dato actual. Esto indica que, aunque hay señales de recuperación mensual, el nivel general de confianza de los consumidores sigue rezagado respecto al año pasado.
El ICC es un indicador que mide la percepción de los consumidores sobre su situación económica actual y futura, tanto a nivel personal como nacional. Se construye a partir de cinco componentes que evalúan cómo ven los hogares su economía familiar, la economía del país y su disposición para realizar compras importantes. Su evolución es considerada una señal temprana del comportamiento del consumo privado, un motor clave de la actividad económica en México.
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Aumenta la disposición a gastar, pero persisten dudas económicas
Contexto: el alza mensual en la confianza se explica por mejoras en los cinco componentes del indicador. El mayor avance se dio en la disposición para adquirir bienes duraderos, que subió 2.2 puntos hasta llegar a 32.0, impulsando la expectativa de consumo en los hogares.
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Los datos del Inegi también registran aumentos en la percepción sobre la situación económica actual del hogar (+0.8 puntos), y en las expectativas familiares a 12 meses (+0.5 puntos). En cuanto a la economía nacional, la visión futura mejoró 1.3 puntos, y la percepción actual, 0.8.
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No obstante, persisten señales de cautela. Entre los indicadores complementarios, aunque hay una ligera mejora en las posibilidades de ahorro y en los planes para vacaciones o compra de automóviles, las expectativas sobre el empleo futuro bajaron 2.1 puntos en su comparación anual.
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Además, la expectativa de una menor inflación sigue siendo limitada, con apenas 18.0 puntos, lo que refleja la persistencia de preocupaciones sobre el alza de precios. Este componente ha mostrado un rezago constante a lo largo del año, lo cual sugiere que los hogares siguen percibiendo presiones sobre su poder adquisitivo.
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Aunque la inflación general ha mostrado cierta moderación en los últimos meses, para muchos consumidores los precios de alimentos, transporte y servicios continúan siendo elevados, lo que impacta directamente su confianza para gastar y ahorrar.