El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, aseguró que México enfrenta una etapa decisiva con la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), al considerar que el país cuenta con grandes ventajas competitivas.
“Las posibilidades de México son muy grandes, sólo hay que verlas. No nos hemos dado cuenta de lo que hace México en manufactura, no sólo automotriz, aeronáutica, dispositivos médicos… estamos exportando 17 mil millones de dólares. ¿Por qué? Por tus habilidades con manufactura muy avanzada, muy compleja. Entonces eso para Estados Unidos va a ser una necesidad estratégica”, afirmó Ebrard.
Contexto: Durante su participación en un evento organizado por el Milken Institute, el funcionario subrayó que México ha desarrollado una red industrial sofisticada que lo convierte en un actor esencial para la cadena de suministro de América del Norte.
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Presume fortaleza manufacturera
Ebrard destacó que la fortaleza del país en manufactura avanzada, especialmente en sectores como el automotriz, aeronáutico y médico, ha impulsado exportaciones millonarias y colocado a México como uno de los principales proveedores de Estados Unidos.
La revisión del T-MEC será, según Ebrard, es una oportunidad para que México fortalezca su posición en sectores de alto valor agregado y reduzca su dependencia de importaciones.
El funcionario destacó que el país cuenta con capital humano calificado, zonas industriales en crecimiento y cercanía geográfica con Estados Unidos, factores que lo colocan en una posición privilegiada frente a otros competidores globales.
“México no sólo fabrica, sino que innova. Esa es nuestra carta más fuerte”, subrayó.
Negociaciones arancelarias con Estados Unidos
En torno a las recientes tensiones comerciales por los aranceles que el gobierno estadounidense ha planteado, Ebrard explicó que México mantiene un proceso de negociación dentro de los marcos multilaterales, particularmente con la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“México está obligado por la OMC. Normalmente se lleva unos 60 días, es el plazo convenido, y hemos querido ser respetuosos de eso porque estamos en la OMC. Al final de ese proceso ya informaremos los resultados”, apuntó.
De acuerdo con el secretario, el respeto a las reglas internacionales es una muestra de la madurez comercial y diplomática de México, que busca mantener relaciones estables con sus principales socios sin renunciar a su soberanía económica.