Con su declaración de culpabilidad, Ismael “El Mayo” Zambada, mantuvo a buen resguardo los secretos que acumuló durante su carrera de 50 años como narcotraficante y el gobierno de Estados Unidos podrá difundirlos a su conveniencia e incluso para negociar acuerdos de caracter comercial o de seguridad, estimaron especialistas en seguridad consultados por La Silla Rota.
Aunque Estados Unidos presuma que habrá un desmantelamiento del Cártel de Sinaloa, luego de que el "Mayo" Zambada se declaró culpable, eso no corresponde con lo que pasa en México, comenta por su parte el analista y consultor David Saucedo.
La razón es que Zambada aún tiene intereses en el crimen organizado mediante su hijo Ismael Zambada Sicairos, conocido como el “Mayito Flaco”.
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Saucedo ve que la forma en que “El Mayo” se declaró culpable forma parte del nuevo esquema de negociación entre autoridades estadounidenses y los narcos, quienes, a cambio de ser testigos, reciben beneficios.
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En ese sentido, cree que el exlíder del Cártel de Sinaloa sí le dio información a Estados Unidos sobre políticos y militares que negociaban con la facción de los Chapitos, hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, su antiguo aliado, pero con los que ahora libran una batalla encarnizada tras el secuestro y entrega de Zambada a EU, que llevó a cabo uno de los hijos de Guzmán Loera.
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Esa información será empleada por la administración del presidente Donald Trump para negociar acuerdos en materia de seguridad, comercial y de otros temas con México.
Una vejez tranquila
Al declararse culpable ante la Corte de Distrito Este en Brooklyn, Nueva York, sin apostar por un largo juicio, Ismael “El Mayo” Zambada logró que sus últimos días transcurran en una cárcel con medidas de seguridad menos estrictas que las aplicadas a su compadre y exsocio en el Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Así lo ve el especialista en temas de Seguridad, César Gutiérrez Priego.
A cambio, Estados Unidos le decomisará bienes por 15 mil millones de dólares y se colgará la medalla de llevar a prisión al narcotraficante más escurridizo de México, famoso por su misterio.
El gobierno de México, por su parte, recibió un guiño por parte de Zambada, a través de su abogado, Frank Pérez, al decir que la información del “Mayo” se queda con el “Mayo”. Para Gutiérrez Priego, el narcotraficante, famoso por su cálculo político, midió que si hablaba de más, su familia en México podría verse en riesgo, estima Gutiérrez Priego, experto en derecho criminal.
Las contradicciones de la negociación
Por su parte, el analista Víctor Hernández critica al gobierno de Estados Unidos, al hacer una grotesca negociación con el Mayo Zambada, integrante del Cártel de Sinaloa, organización que el pasado 20 de febrero la administración de Trump declaró terrorista, algo similar a lo que hizo con Ovidio Guzmán.
Hernández, quien es profesor de Seguridad nacional en la Universidad Ibero de Puebla, también interpreta que con el anuncio espectacular que dio la fiscal Pam Bondi, para Estados Unidos es más importante lo que diga Ismael “El Mayo” Zambada que las autoridades mexicanas. Prevé, como Saucedo, que en los próximos meses saldrán más nombres pero que serán dosificados.
El analista considera que no es la primera vez que el gobierno de Estados Unidos negocia con quienes considera terroristas. Lo mismo hizo con Ovidio Guzmán, quien como el “Mayo”, se declaró culpable el 11 de julio pasado.
“Lo de Ovidio no tuvo precedentes, a eso de que no solo entró él, sino que además salía más barato por docena y se llevó casi casi hasta su bisabuela Chuchita y con todas las facilidades de Estados Unidos, pues eso es inusual y es una incongruencia de la política exterior estadounidense”.
Una sorpresa
Gutiérrez Priego, reconoce que le sorprendió la declaración de culpabilidad del narcotraficante, así como la postura de la fiscal de Estados Unidos, Pam Bondi, de agradecer a las autoridades mexicanas por colaborar para enviar a líderes de organizaciones de la delincuencia organizada.
No se cumplió el escenario que algunos pronosticaban, de que Zambada revelara nombres de autoridades sobornadas por él y el Cártel de Sinaloa para permitirle sus actividades ilícitas de narcotráfico. Incluso, que se involucrara a funcionarios de la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador
En cambio, Estados Unidos se colgó la medalla de tener preso a Zambada, y mandó un mensaje entrelíneas, cuando la fiscal Bondi explicó que las autoridades de Estados Unidos rastreaban el dinero de los narcotraficantes.
“Ahora entendemos por qué hubo cambios en la Unidad de Inteligencia Financiera y pusieron a un policía en lugar de un político”, dice el abogado, luego de que el anterior titular, Pablo Gómez, dejó el cargo el 2 de agosto y fue sustituido el 14 por Omar Reyes Colmenares.