Viajar a Estados Unidos es un objetivo frecuente entre personas mexicanas, ya sea por motivos turísticos, laborales, educativos o familiares. Sin embargo, para ingresar legalmente al país vecino es imprescindible contar con una visa americana vigente, documento que permite al portador presentarse en un puerto de entrada y solicitar admisión ante las autoridades migratorias.
Cabe mencionar que obtener dicho documento migratorio no es un trámite inmediato ni garantizado, por lo que resulta esencial conocer los pasos, tiempos, y las instituciones que intervienen en el proceso.
Asimismo, vale la pena destacar que aunque obtener la visa no garantiza el ingreso a territorio estadounidense, sí es un requisito fundamental. Es en el punto de entrada, generalmente en aeropuertos o cruces fronterizos, donde el oficial de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) toma la decisión final sobre la entrada del viajero. Por ello, estar bien preparado, conocer el propósito del viaje y llevar documentación de respaldo, puede marcar la diferencia entre una entrada sin contratiempos o una revisión prolongada.
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¿cómo se tramita una visa y qué papel juegan las autoridades consulares?
Contexto: El proceso para solicitar una visa estadounidense comienza con la elección del tipo de visa que se necesita. Las más comunes para quienes viajan desde México son las de no inmigrante, como la visa B1/B2, que se otorga para propósitos de turismo, negocios o atención médica. Una vez identificado el tipo de visa, el solicitante debe llenar en línea el formulario DS-160, un documento oficial que recoge datos personales, motivos del viaje y antecedentes del solicitante. Este formulario debe completarse en inglés y con total veracidad, pues la información será evaluada por los funcionarios consulares.
Después de completar el formulario, se debe crear un perfil en el sitio oficial del Servicio de Información de Visas y realizar el pago correspondiente. Posteriormente, el sistema permitirá programar dos citas: una en el Centro de Atención al Solicitante (CAS), donde se toman huellas y fotografías, y otra en la sección consular de la embajada o en uno de los consulados estadounidenses en México, donde se lleva a cabo la entrevista.
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En la entrevista consular se evalúa si el solicitante califica para recibir una visa, tomando en cuenta su perfil, vínculos con México y motivos de viaje. No presentar documentos falsos ni proporcionar información inexacta es crucial, pues cualquier intento de engaño puede conllevar la negativa definitiva.
En cuanto a la programación de citas, en los últimos años se ha registrado una alta demanda de solicitudes, lo que ha provocado que los tiempos de espera sean mayores en ciertas ciudades. Por ello, se recomienda iniciar el trámite con suficiente anticipación, ya que obtener una cita puede tomar desde unas semanas hasta varios meses (incluso años), dependiendo de la sede consular y la temporada.
En esta fecha me darán mi visa americana si la tramito en julio de 2025
Actualmente, la alta demanda ha provocado que la mayoría de los consulados estadounidenses en México registran tiempos de espera superiores a un año en dado caso de que los trámites de solicitud de visa comiencen durante el mes de julio.
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Y es que de acuerdo con el Servicio Oficial de Citas para Visas, el consulado con la fecha más próxima disponible es el de Nogales, Sonora, con entrevistas disponibles a partir del 2 de octubre de 2025. En contraste, en ciudades como Matamoros, Monterrey y la Ciudad de México, las fechas más cercanas van desde abril hasta julio de 2026.
En otros consulados, como Ciudad Juárez, Guadalajara, Hermosillo, Mérida, Nuevo Laredo y Tijuana, los espacios disponibles para citas por primera vez también se extienden hasta finales de 2025 o bien entrado 2026. Esta situación ha generado preocupación entre solicitantes que tienen planes inmediatos de viaje y que ahora deberán reconfigurar sus calendarios o considerar cambios de sede para adelantar su trámite.
La espera prolongada se debe a varios factores, entre ellos el rezago generado por la pandemia, la creciente demanda y la capacidad limitada de las sedes consulares para atender al número de solicitantes. Por ello, autoridades y expertos recomiendan iniciar el trámite con suficiente tiempo y mantener la documentación en regla, ya que ningún paso del proceso debe tomarse a la ligera.
AJA