En un contexto internacional marcado por tensiones migratorias y más de un centenar de conflictos armados, el canciller Juan Ramón de la Fuente afirmó que, a pesar de vivir “tiempos críticos”, México mantiene su compromiso con la solución pacífica de las controversias.
Durante un videomensaje transmitido en el acto de presentación del programa “Cultura de paz: un semillero universitario” de la UNAM, el secretario de Relaciones Exteriores lamentó las redadas contra migrantes en Estados Unidos y alertó sobre una creciente violencia global que afecta a millones.
"Vivimos una situación crítica a nivel mundial en donde hay 120 conflictos armados que afectan a más de 300 millones de personas", dijo.
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Frente a este panorama, subrayó que la política exterior de México, como nación fundadora de la ONU desde la Conferencia de San Francisco en 1945, sigue guiada por los principios de paz y seguridad internacional.
De la Fuente también destacó el papel clave que desempeñan las mujeres en la consolidación de procesos de paz duraderos.
“La participación de las mujeres en la construcción y el mantenimiento de la paz es fundamental, porque hay evidencias contundentes de que ellas son más eficaces para construir y sostener la paz a lo largo del tiempo”, señaló.
Rector de la UNAM pide respeto a migrantes en EU
Durante la firma del acuerdo por el que se crea el Programa Universitario de Cultura de Paz y Erradicación de las Violencias, el rector Leonardo Lomelí Vanegas también manifestó su preocupación por la situación que viven comunidades migrantes en Estados Unidos, en especial en Los Ángeles, California, donde las recientes detenciones han generado protestas.
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Llamó a que las medidas migratorias respeten los derechos humanos y se apeguen al marco legal nacional e internacional.
"La violencia es un comportamiento aprendido culturalmente"
Lomelí Vanegas afirmó que “nuestra misión es alimentar el pensamiento crítico, generar alternativas y sembrar esperanza. La paz debe surgir tanto en las aulas como en los núcleos familiares y comunitarios, fomentarse en toda práctica cotidiana y manifestarse en la palabra que dialoga en lugar de confrontar”, aseveró luego de firmar el acuerdo.
Acompañado por el secretario de Educación Pública, Mario Delgado Carrillo, y la Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú Tum, el rector explicó que esta estrategia busca modificar de raíz los marcos de interacción y decisión, promoviendo una cultura de paz entendida como justicia, inclusión, respeto mutuo, sostenibilidad y cooperación.
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“La violencia es un comportamiento aprendido culturalmente, y como tal, puede desarraigarse”, apuntó. “La paz no es su opuesto pasivo, sino parte del mismo proceso: se elige y se practica con conciencia y compromiso. También exige cambios culturales de gran calado, voluntad política y el involucramiento activo de las instituciones públicas y privadas y de la sociedad civil”.
El programa se estructurará en ejes como formación y docencia, investigación aplicada, protocolos para enfrentar situaciones de violencia, mediación comunitaria, arte y cooperación. Entre las primeras acciones se implementarán cursos para estudiantes de nuevo ingreso, un diagnóstico por plantel y una asignatura transversal sobre Cultura de Paz y Mediación a partir del próximo ciclo escolar.
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“Hagamos de la UNAM un espacio donde florezca aún más la justicia, la igualdad, la solidaridad y la pluralidad. Que esta iniciativa universitaria nos impulse a convertir la paz en una experiencia concreta: no un horizonte inalcanzable, sino una forma de educar desde el cuidado y de habitar, en común, un presente digno”, dijo Lomelí Vanegas.
gph
