Las olas de calor han azotado a México con intensidad en los últimos años, y 2025 no es la excepción. Con temperaturas que superan los 45 grados Celsius en algunas regiones del país, especialistas alertan sobre los efectos de estos fenómenos extremos en la salud, la economía y el medio ambiente. A esto se suman eventos recientes de llamaradas solares, que si bien ocurren fuera de la atmósfera terrestre, pueden tener efectos indirectos sobre el clima y los sistemas tecnológicos en la Tierra.
Una ola de calor es un evento meteorológico que ocurre cuando las temperaturas máximas se mantienen anormalmente elevadas por varios días consecutivos. No solo se trata de calor extremo durante el día, sino también de noches cálidas que impiden que el ambiente se refresque.
En México, este fenómeno puede durar desde unos pocos días hasta varias semanas, y sus efectos varían dependiendo de la zona geográfica. Las regiones más afectadas suelen ser el norte, noreste y occidente, aunque en años recientes el fenómeno ha alcanzado con severidad incluso el centro y sur del país.
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¿Cuándo es la temporada de calor en México?
Contexto: La temporada de altas temperaturas en México generalmente inicia en marzo y se extiende hasta septiembre, alcanzando su punto máximo entre mayo y junio e incluso parte de julio, cuando la radiación solar es más intensa y la presencia de lluvias aún es limitada; durante este periodo, se pueden presentar muchas olas de calor en un mismo año.
México enfrenta cada vez más eventos de calor extremo, y es crucial que la población esté informada y preparada. Las autoridades de salud y protección civil recomiendan evitar la exposición al sol en horas pico, mantenerse hidratado, usar ropa ligera y protegerse del calor. Las consecuencias de las olas de calor pueden ser graves:
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- Salud: aumento de casos de golpe de calor, deshidratación, enfermedades respiratorias y complicaciones cardiovasculares, especialmente en niños, personas mayores y trabajadores al aire libre.
- Agricultura: estrés hídrico en cultivos y ganado, pérdida de cosechas y escasez de agua.
- Energía: sobrecarga en el sistema eléctrico por el uso excesivo de aires acondicionados y ventiladores.
- Medio ambiente: incremento de incendios forestales, reducción de niveles en cuerpos de agua y degradación de ecosistemas.
Esto provocarían las llamaradas solares en el clima de México
Lo primero que hay que saber es que las llamaradas solares son explosiones de energía en la superficie del Sol que liberan grandes cantidades de radiación. Aunque no provocan directamente olas de calor, pueden influir en la atmósfera terrestre, afectando sistemas de comunicación, redes eléctricas y satélites.
Algunas teorías han sugerido posibles conexiones entre la actividad solar intensa y variaciones climáticas, pero no hay evidencia científica concluyente que relacione directamente las llamaradas solares con aumentos de temperatura en la Tierra. Aun así, estas explosiones solares se monitorean constantemente por su impacto potencial en la tecnología y en la magnetosfera del planeta.
En ese sentido, es importante mencionar que durante los últimos días, el Sol ha entrado en una fase de actividad inusualmente intensa, generando una serie de potentes llamaradas solares que han captado la atención de científicos, agencias espaciales y expertos en meteorología espacial alrededor del mundo.
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Desde el pasado 7 de mayo, los especialistas han registrado múltiples erupciones solares, incluyendo al menos siete eyecciones de masa coronal (CME) dirigidas hacia la Tierra. Las CME son explosiones gigantes de plasma y campo magnético que pueden viajar millones de kilómetros por el espacio, y cuando impactan el campo magnético terrestre, pueden causar tormentas geomagnéticas.
Aunque estas explosiones ocurren a millones de kilómetros de distancia, sus efectos pueden sentirse casi de inmediato en el planeta, sobre todo en el hemisferio que se encuentra directamente expuesto al Sol en el momento del estallido. Los impactos más comunes incluyen:
- Interferencias en las comunicaciones por radio, especialmente en frecuencias de alta frecuencia (HF), utilizadas en aeronáutica y navegación marítima.
- Afectaciones en los sistemas de posicionamiento global (GPS).
- Interrupciones en redes eléctricas y satelitales si la tormenta geomagnética alcanza niveles severos.
- Auroras boreales y australes más intensas, visibles en latitudes más bajas de lo habitual.
AJA
