VIOLENCIA DE GÉNERO

CIDE: acusan a Romero Tellaeche de descalificar participación de mujeres en seminario de género

Integrantes del Seminario Interdisciplinario de Mujeres, Género y Feminismos señalaron que estas conductas les preocupan por el contexto histórico de exclusión de las mujeres en espacios públicos y académicos

Acusaciones en el CIDE.José Antonio Romero Tellaeche.Créditos: Cuartoscuro
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Integrantes del Seminario Interdisciplinario de Mujeres, Género y Feminismos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) enviaron una carta al director general de la institución, José Antonio Romero Tellaeche, en la que expresaron su inconformidad por la forma en que se dirigió a trabajadoras durante una reunión informativa con la comunidad sindical femenina, realizada el 1 de octubre.

En el documento, recibido por la Dirección General el 2 de octubre, las firmantes detallan que durante la sesión el director interrumpió a una de las participantes, pidió a otra que bajara el tono de voz y descalificó algunas preguntas, además de mostrar gestos de molestia y desatender a una trabajadora mientras hablaba.

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Las integrantes del Seminario señalaron que estas conductas les preocupan por el contexto histórico de exclusión de las mujeres en espacios públicos y académicos, y solicitaron que el CIDE garantice un ambiente institucional donde todas puedan participar sin violencia ni discriminación.

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En la carta se argumenta que este comportamiento contraviene los compromisos del servicio público establecidos en el Código de Ética de la Administración Pública Federal. Asimismo, el grupo pidió que en adelante las autoridades del CIDE actúen con respeto, profesionalismo y apego a los derechos de igualdad y no discriminación hacia las mujeres de la comunidad.

Las acciones por las que señalan a Romero Tellaeche

El documento que ha sido recibido por la dirección general del CIDE, señala que:

"Durante la reunión, en vez de responder a preguntas de fondo sobre la ausencia de una planeación financiera institucional, las irregularidades de pagos y la discrecionalidad en la asignación de plazas académicas, el director general optó por evadir o descalificar dichas preguntas, incurriendo (entre otras) en las siguientes acciones:

  1. Interrumpió a una compañera que planteó una pregunta pertinente al tema convocado en la reunión.
  2. Haciendo un gesto de notoria molestia, pidió a la compañera, quien hablaba en tono regular, que bajara su tono de voz.
  3. Cuando le tocó responder, dijo que la pregunta fue tan larga que ya la había olvidado, descalificando con estas palabras la pregunta y evadiendo responderla.
  4. A otra compañera, al manifestar la inconformidad con la respuesta otorgada, le respondió con gestos de burla, que terminaron en lo que pareció ser un beso hacia la compañera que expresaba su descontento.
  5. Cuando otra compañera expresó su punto de vista, el director dirigió su atención a su aparato móvil, sin prestar atención ni dirigir la mirada hacia la compañera trabajadora que le hablaba."

CIDE: polémicas en la gestión de Romero Tellaeche

Contexto: desde su nombramiento como director general del CIDE, José Antonio Romero Tellaeche ha estado en el centro de controversias por irregularidades señaladas en el proceso de designación. Según medios como La Silla Rota, el acta formal del nombramiento careció de la firma del Consejo Técnico, lo que habría puesto en entredicho la validez del procedimiento institucional.

También se han reportado quejas de miembros del Consejo Directivo que aseguran que su voto en contra no fue considerado, pese a que su postura fue manifestada formalmente. 

Las críticas al proceso no se limitaron a la legalidad formal. La comunidad académica del CIDE denunció que el mecanismo de auscultación interna favoreció a otro candidato con mejor evaluación entre los profesores, y que en la etapa externa se convocó a personas cercanas a Romero Tellaeche para favorecer la aprobación de su nombramiento.

Cuartoscuro

Estas acusaciones de “imposición” generaron protestas estudiantiles, tomas de instalaciones y solicitudes de amparo para anular el nombramiento.

El cuestionamiento de su liderazgo también integra señalamientos académicos. En 2022 se le acusó de plagio por reproducir párrafos de la obra de investigadores turcos sin la cita adecuada.

La Comisión de Ética del CIDE concluyó que los plagios constituyen una falta grave, pero el dictamen no prosperó en sanción por no alcanzarse los votos necesarios para aplicar medidas disciplinarias.

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