La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que el incremento al Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS) a refrescos y comida chatarra no busca recaudar más recursos, sino inhibir su consumo por razones de salud pública. Sin embargo, datos del Paquete Económico 2026 revelan que el gobierno federal espera recaudar 75 mil 290 millones de pesos, un aumento del 73.8 % respecto al estimado de 43 mil 330 millones de pesos para 2025.
sheinbaum defendió el aumento al IEPS a bebidas azucaradas como una política de salud pública, y no una estrategia recaudatoria. Sin embargo, cifras oficiales del Paquete Económico 2026 revelan que el gobierno federal proyecta recaudar 75 mil 290 millones de pesos por este concepto, lo que representa un aumento del 73.8 % respecto a los 43 mil 330 millones estimados para 2025.
Contexto: desde 2014, México aplica el IEPS a las bebidas con azúcares añadidos. Este impuesto ha tenido una doble finalidad: recaudatoria (generar ingresos para el sector salud) y sanitaria (desincentivar el consumo de bebidas azucaradas, asociadas a padecimientos crónicos como la obesidad y la diabetes).
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Bajo el régimen actual (previo a la propuesta de 2026), la cuota específica vigente es de aproximadamente 1.64 pesos por litro para refrescos y otras bebidas saborizadas con azúcar. Las bebidas consideradas "light", "zero" o sin azúcar (que usan edulcorantes en lugar de azúcar) generalmente estaban exentas de esta cuota específica del IEPS para bebidas azucaradas.
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Sin embargo, en la Propuesta de Reforma para 2026 se plantea una reforma que busca generar recursos adicionales por cerca de 41 mil millones de pesos para destinarlos al sector salud (IMSS, ISSSTE, IMSS-Bienestar).
Esta reforma implica dos cambios centrales:
1. Incremento de la Cuota para Bebidas Azucaradas (Versión Regular)
La propuesta es duplicar la cuota específica. El gravamen pasaría de 1.6451 pesos por litro a 3.08 pesos por litro, lo que representa un incremento de aproximadamente 87%.
Con ello, el gobierno estima que este aumento podría lograr una reducción del consumo de refrescos de cerca del 7% en los primeros años.
2. Eliminación de la Distinción Fiscal: Inclusión de Bebidas "Light"
La propuesta establece que las bebidas con edulcorantes (ya sean artificiales o naturales) también pagarán el IEPS, y lo harán al mismo nivel que las bebidas con azúcar.
La nueva tasa para eliminaría la exención y pasarían a pagar una cuota de 1.50 pesos por litro.
Reducir consumo
El gobierno federal y la industria refresquera acordaron que la tasa del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios para bebidas endulzadas con edulcorantes no calóricos, las versiones light, "sin azúcar" o "cero". será de 1.5 pesos por litro, mientras la propuesta original era de 3.08 pesos por litro.
“El objetivo no es recaudar dinero sino que se consuma menos”, aseguró la mandataria durante su conferencia matutina del 17 de octubre.
El 9 de septiembre, Sheinbaum también lo dijo en su conferencia mañanera:
"La recaudación relacionada con eso se va a un fondo para atender las enfermedades y padecimientos que están vinculados con el exceso de consumo"
Sheinbaum reiteró que el impuesto busca reducir los niveles de consumo de refrescos y comida chatarra, señalando que el sobrepeso y la obesidad infantil han aumentado, según datos del programa “Vive saludable, vive feliz” aplicado en escuelas primarias.
Clark explicó que los compromisos incluyen reducir 30% el contenido de azúcar en las bebidas en el plazo de un año, impulsar alternativas light y zero, y diferenciar claramente los precios de estas opciones.
Pacto con la industria: menos azúcar, más control
El anuncio fue acompañado por un acuerdo entre el gobierno y la industria refresquera, donde las empresas se comprometieron a reducir en 30% el contenido de azúcar de sus productos, restringir la publicidad dirigida a menores y aceptar una diferenciación de precios entre bebidas con y sin calorías.
El subsecretario de Salud, Eduardo Clark, detalló que el impuesto se mantendrá en 3.08 pesos por litro para bebidas con azúcar, mientras que las versiones sin calorías pagarán 1.50 pesos por litro. Afirmó que el acuerdo será verificable:
“Si seguimos viendo publicidad con menores, claramente no lo están cumpliendo, y el Gobierno tiene herramientas para medidas más fuertes”, advirtió.