Un trabajador con insuficiencia renal en fase terminal logró que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) le otorgara una pensión por invalidez después de una batalla legal que culminó con un fallo a su favor por parte de un Juez de Distrito. Este caso marca un precedente importante en la interpretación de los derechos laborales y de seguridad social en México.
El trabajador, que se desempeñaba como despachador de gasolina, solicitó al IMSS una pensión por invalidez debido a la grave evolución de su enfermedad, que lo incapacitaba para realizar actividades básicas como vestirse, alimentarse y asearse sin asistencia. A pesar de los peritajes médicos que demostraban su estado crítico y necesidad de atención permanente, el IMSS negó la pensión, argumentando que el trabajador seguía laborando al momento de la solicitud.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Te podría interesar
El Juez de Distrito Javier Pérez Santamaría, adscrito al Tribunal Laboral Federal de Asuntos Individuales en el estado de Hidalgo, dictaminó que el trabajador tenía derecho a la pensión por invalidez permanente. El juez consideró que, acorde al principio de realidad, el trabajador continuaba trabajando pese a su condición terminal porque necesitaba los ingresos para sobrevivir y mantener a su esposa, careciendo de otros recursos.
El juez concluyó que la condición de salud del trabajador, siendo un padecimiento degenerativo que empeora con el tiempo, lo incapacita para desempeñar sus labores y justifica la pensión por invalidez. Además, ordenó al IMSS pagar la pensión de forma retroactiva desde 2021, así como una pensión por asignación familiar a su esposa y ayuda asistencial, junto con cualquier otra prestación económica correspondiente.
Implicaciones del Criterio Jurídico
Este fallo resalta un criterio jurídico significativo: la mera continuidad laboral de un trabajador gravemente enfermo no es suficiente para negar una pensión de invalidez. Este principio establece que la necesidad económica de seguir trabajando no puede ser un motivo para desestimar la gravedad de una enfermedad terminal y sus efectos incapacitantes.
El caso de este trabajador con insuficiencia renal en fase terminal y el fallo del Juez de Distrito Javier Pérez Santamaría son un recordatorio de la importancia de la empatía y la justicia en el sistema de seguridad social. La decisión de otorgar la pensión solicitada, pese a la negativa inicial del IMSS, reafirma los derechos de los trabajadores a recibir el apoyo necesario en momentos de extrema vulnerabilidad.
Reacciones y Repercusiones
El fallo ha sido bien recibido por defensores de los derechos laborales y organizaciones de la sociedad civil, quienes ven en esta decisión un avance en la protección de los trabajadores con enfermedades terminales. También subraya la importancia de que las instituciones de seguridad social consideren la realidad económica y médica de los solicitantes al evaluar las peticiones de pensiones por invalidez.
Esta sentencia no solo ofrece un respiro económico y asistencial al trabajador afectado y su familia, sino que también sienta un precedente que podría influir en futuras decisiones similares, obligando a las instituciones a adoptar una visión más humana y realista en la evaluación de las solicitudes de pensión por invalidez.