“Muy probablemente, muy seguramente” -estimó el periodista y escritor Jorge Zepeda-, durante su gobierno Claudia Sheinbaum ajustará “un par de grados hacia el centro” el péndulo de la política, de cara a que el divorcio entre lo político y lo económico no puede caminar demasiado largo.
Zepeda Patterson -Mazatlán, 1952- consideró que los retos y las oportunidades que se le presentan al país sólo podrán ser aprovechados por la nueva presidenta de la República “creciendo más” y mediante un pacto con el sector empresarial, sobre el cual consideró que “ya entendió que cometió serios errores durante el gobierno previo de Andrés Manuel López Obrador; que esta fuerza política llegó para quedarse”.
“Este corrimiento hacia el centro (de Sheinbaum) estará lleno de trincheras y minas…, algunas provendrán del propio grupo cercano a López Obrador. El reto será realizarlo sin poner en riesgo el enorme patrimonio político que tiene en este momento, que es su apoyo popular”, sostuvo el autor de la columna periodística “Pensándolo bien”, dedicada a la reflexión -y la disección, se podría decir- de los impulsos que dominan a las izquierdas en México desde el inicio del gobierno López Obrador.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Sobre este último, considera que su arribo al poder estuvo potenciado por la expresión local de un hartazgo generalizado en el mundo contra las promesas incumplidas de la globalización y la democracia. “Se conecta su formación en el PRI tradicional con su liderazgo y su carisma… nunca la izquierda había tenido esa popularidad, ni esa base social”, aseguró.
“Es un populista muy curioso, con una estrategia macroeconómica ligada a la estabilidad. Muy progresista en lo social, muy conservador en la económico…, un hombre de muchas contradicciones, profundamente nacionalista, al grado de que se olvida del resto del mundo. Y lo imposible: socio de Trump en las relaciones con Estados Unidos, con un enorme realismo. Sí, una mezcla de todas sus contradicciones”.
Zepeda Patterson conversó con La Silla Rota en ocasión del lanzamiento de su libro “Presidenta. La victoria de una mujer en un país de hombres” (Planeta). En este trabajo, 15 de sus 17 capítulos están dedicados a profundizar en que hasta ahora se conoce de la biografía de Sheinbaum Pardo.
Directivo de medios de comunicación de referencia por más de 20 años -periódicos, revistas y pioneros sitios digitales-, Zepeda ha sido analista político en varias tribunas. En 2013 incursionó en la novela, campo en el que ha cosechado reconocimientos nacionales y de rango internacional.
En su opinión, el arranque del gobierno Sheinbaum fue precedido por una vivencia de la apertura del mercado entendida sólo como lo que llama “un capitalismo de cuates”, que para 2018 -año del triunfo de López Obrador- acumulaba 35 años de pérdida adquisitiva del salario, una mayoría de la población sumida en la economía informal, y un desencanto con las fórmulas políticas vigentes, primero con las décadas del PRI, luego los dos sexenios del PAN, y una nueva oportunidad para el PRI.
SÍGUENOS EN EL SHOWCASE DE GOOGLE NEWS
“Los canales tradicionales para expresar el interés político estaban agotados… y ‘sucedió’ López Obrador: masas inconformes que, de alguna manera, encontraron en él un vehículo para expresar su deseo, su hartazgo, su voluntad de cambio”.
Al pedirle una reflexión sobre cuáles serán, en perspectiva, las transformaciones reales que se le puedan reconocer a López Obrador, apuntó que López Obrador terminó en “un campo de batalla, de blanco y negro, donde si no estás conmigo estás contra mí”.
En contraparte, consideró, el gran error de la oposición a lo largo del sexenio fue creer que López Obrador era la causa de la inconformidad; “una mala jugada de la historia, un anacronismo del pasado de este México profundo, sin las cualidades para dirigir un país moderno y sofisticado. Y se limitó durante seis años a tratar de demostrar que era falso, un manipulador, creyendo que así lo regresaría al redil”.
Concluyó: “Yo creo que con todas sus contradicciones (López Obrador) creó el milagro de revertir la maquinaria, girar el timón unos grados y voltear al país para mirar a los de atrás. ¿No es eso un pequeño milagro? Y creo también que cambió la noción del Estado mexicano. Quisiera ver al próximo gobernador al que se le conozca por agarrar el helicóptero todos los fines de semana para ir a jugar golf (en alusión a Enrique Peña Nieto)”.
Claudia: la IP, la academia…, y los “duros”
Para el sector empresarial, aseguró Zepeda Patterson, la oposición no es hoy un vehículo para expresar sus intereses. Se trata de una actitud totalmente distinta a la que tuvieron por años con López Obrador, “con quien la idea era tratar de neutralizarlo, ponerlo contra la pared para que no hiciera locuras, en la perspectiva de ellos”.
“Hay ahora mejores actitudes de parte de ellos, pero también de Claudia (Sheinbaum), quien durante su campaña hacía actos públicos, y en la noche se reunía con empresarios de cada localidad. Y se deben incluir las reacciones de ella ya como presidenta electa, al reaccionar cuando algo sobresaltaba a los mercados. El reto ahora es cómo conservar el apoyo popular y a la vez convencer a los empresarios. Encontrarse en un punto intermedio”.
Refirió Zepeda que para elaborar su libro sobre el triunfo presidencial de Claudia Sheinbaum, sostuvo con ella dos largas conversaciones privadas, de tres horas cada una, además de cubrir un largo listados de entrevistas con personajes cercanos a ella, y de una investigación profunda.
Sobre esos encuentros con la ahora nueva presidenta, describió:
“Me sirvió mucho hablar con ella…, detecté a una persona que tiene todavía mucho de autenticidad. Es de clase media, como muchos de nosotros; con acceso a la universidad, etcétera. Muy dedicada a su vocación científica. Una cosa de la cual la gente no se percata es que, a los 61 años de ella, ha dedicado 25 esencialmente a la academia y a su trabajo como investigadora. Y sólo 16 a la administración pública, incluso tomó recesos importantes para cursar posgrados…”.
¿El corrimiento de la presidenta Sheinbaum al centro, como lo prevés, puede atraer reacciones de los grupos más duros dentro del movimiento obradorista, de gobernadores de Morena, o desde el interior del propio Morena?, se le preguntó.
“Me da la impresión -dijo- que a la mejor no se aguantan las ganas de salir a la palestra para hacer alguna rectificación. Pero la vigencia del presidencialismo está en el ADN del país. Es difícil encontrar en la historia reciente una personalidad tan poderosa como la de López Obrador. Pero ahí está el caso de Ernesto Zedillo: no hubiera sido capaz de lanzar una arenga en el Zócalo, carecía de base social. Sin embargo, antes de un año ya había metido a la cárcel al hermano de (su antecesor) Salinas de Gortari”.