CONSUMO RESPONSABLE

Reparaciones Vs obsolescencia programada, un esfuerzo para un consumo responsable

El tercer sábado de cada año se conmemora el Día Mundial de la Reparación, un esfuerzo para concienciar a las personas sobre el ahorro de recursos para un medio ambiente sustentable.

Escrito en NACIÓN el

Este 19 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Reparación, que desde 2017 se celebra para promover un mundo más sustentable, que prescinda de tantos elementos materiales de desperdicio y que pueda darle utilidad a múltiples dispositivos que existen alrededor del mundo.           

El objetivo de una celebración de esta naturaleza es promover una vida útil más duradera en aparatos y diversos dispositivos, que gracias a la posibilidad de reparación, pueden tener un funcionamiento óptimo por más tiempo y evitan una sobreacumulación de desperdicios.  

Este tipo de acciones representan un esfuerzo para paliar los efectos contaminantes que tanta producción industrial y tecnológica generan en el mundo, por medio de un concepto denominado obsolescencia programada, que de acuerdo con información de la Procuraduría Federal del Consumidor, Profeco, consiste en la acción intencional de los fabricantes para que sus productos dejen de funcionar en cierto tiempo determinado. 

Reparar para no desperdiciar 

El objetivo de la obsolescencia programada es vender productos nuevos con mayor frecuencia para brindar mejores ganancias financieras a las empresas que los desarrollan, fabrican y comercializan. Si bien este tipo de acciones promueven el flujo de dinero, también causan una sobreexplotación de recursos para su producción.

El resultado es un mundo que convirtió en vertederos una gran cantidad de ríos, mares, lagunas, barrancas y muchos otros espacios que acumulan desperdicios y sufren los estragos de la contaminación.         

De acuerdo con cifras de Statista, la producción mundial de residuos plásticos se duplicó en sólo 20 años y actualmente ronda los 350 millones de toneladas, mientras que para 2060, se prevé que esta cifra se triplique.

La cultura de la reparación sirve de gran ayuda para evitar los efectos nocivos que trae la obsolescencia programada y el dispendio de recursos naturales. A través de la reparación de aparatos, autos, prendas y otro tipo de productos, es posible darle una nueva vida a las cosas y aportar una acción en contra de efectos nocivos de la polución, tales como el calentamiento global y la contaminación del agua, entre otros.

Por otro lado, también resulta benéfica la cultura de la reparación para promover el ingenio y la creatividad de las personas. Para la reparación de las cosas, las herramientas son esenciales y están a disposición de la gente en muchos espacios de retail y establecimientos especializados. 

Por último, y aprovechando que cada tercer sábado de octubre se celebra el Día Internacional de la Reparación, nuestra recomendación es que emplees este día en descubrir las fallas y desperfectos que puede haber en tu casa y tratar de darles una segunda oportunidad de vida.