El líder del Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya, utilizó el mansplaning en contra de la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, funcionaria que llegó a la Cámara de Diputados y en el estacionamiento fue abordada por periodistas.
A pregunta expresa de la periodista Ilse Aguilar, quien le cuestionó sobre el motivo de su reunión, Alcalde respondió:
“Venimos a reunirnos con los compañeros…”, sin terminar la frase al ser interrumpida por Alberto Anaya quien respondió a la reportera:
“Venimos a grillar”, atajó el líder petista.
¿Qué es el mansplaning?
La palabra “mansplaining” surgió a raíz de una experiencia de Rebecca Solnit, una reconocida escritora. Durante una conversación en una reunión social, un hombre trató de informarla sobre un libro, sin darse cuenta de que Solnit era la autora de ese mismo libro. Esta situación llevó a Solnit a reflexionar sobre una forma específica de condescendencia, principalmente ejercida por hombres hacia mujeres, y escribió un ensayo llamado “Los hombres me explican cosas”.
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El término se refiere a cuando un hombre explica algo a alguien, típicamente una mujer, asumiendo que no sabe de lo que se está hablando, aunque esa persona pueda tener más conocimiento sobre el tema en cuestión. Lili Rothman, periodista, amplió la definición en un artículo para Atlantic, resaltando que esta actitud es predominante de hombres hacia mujeres.
El fenómeno del "mansplaining" no se limita al ámbito académico o profesional. Es un comportamiento que mujeres de distintas áreas y profesiones han experimentado. Por ejemplo, las aficionadas a la música enfrentan constantemente comentarios y preguntas que ponen en duda su genuino interés por una banda o género.
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Diversas organizaciones describen esta actitud como una forma de establecer dominio o control, viendo a las mujeres como competidoras a minimizar. La intención detrás del "mansplaining" va más allá de una simple corrección; se trata de una postura condescendiente, que infantiliza o subestima. Mientras que el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) lo define como un micromachismo por el simple hecho de ser mujeres, un hombre o un grupo de personas desacredita la autoridad de una mujer sobre un tema por no creerla capaz por el simple hecho de ser mujer.
En el entorno digital, especialmente en redes sociales, esta conducta se manifiesta con frecuencia. Mujeres que comparten opiniones o conocimientos en plataformas virtuales suelen recibir respuestas agresivas o despectivas, enfocadas no en el contenido de sus palabras, sino en su género.
Una clave para identificar el "mansplaining" radica en el tono y la actitud. No es el hecho de compartir conocimientos, sino cómo se presenta esa información, asumiendo una postura de superioridad y desestimando a la persona con la que se está conversando.
DJC