A estas alturas en las que ya nos encontramos a nada de que se termine el año todos los pensionados y trabajadores lo que único que ya desean es la llegada de su aguinaldo, sin embargo, la que es la mejor época del año para muchos ya arrancó, es decir, a partir de este 15 de septiembre con el pozole y todos lo antojitos mexicanos se inauguraron las fechas más especiales para muchos, pero también en las que más dinero se gasta por todo lo que implica.
Pero, eso no es todo, también se acercan las fechas en las que más se come, pues a la vuelta de la esquina ya está el Día de Muertos, que se celebra el 2 de noviembre, y aunque esta festividad es dedicada a los muertos en lo que los mexicanos instalan la ya tradicional ofrenda con comida y fruta van dándole un pellizco que aquí que por allá a la comida, además desde estos momentos ya está a la venta el pan de muerto, sí, el pan al que nadie se puede resistir.
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Si bien el pan de muerto no es un alimento que se pueda considerar como malo, explican los expertos. El problema, dicen, radica en las calorías que puede contener y el poco control que tengamos sobre ellas. En este sentido, de acuerdo con sumédico, Elvira Sandoval Bosh, miembro del departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, considera al pan de muerto como un producto alto en carbohidratos debido a los ingredientes que contiene.
De forma típica, el pan de muerto contiene una gran cantidad de calorías que se obtienen por medio de grasas y azúcares que provienen de los ingredientes típicos como harina, azúcar y mantequilla, por eso la experta indica que una de las cosas más importantes a la hora de comer pan de muerto, y evitar que genere daños en nuestra salud, es saber elegir el pan que comemos y las porciones y el IMSS también lo sabe.
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¿Cuál es el aviso del IMSS?
El IMSS lanzó un mensaje sobre los productos naturales del campo mexicano que ofrecen opciones de nutrición saludables y sabrosas. Por eso, recomienda que se ponga puntual atención en las etiquetas para la salud y evitar consumir alimentos con exceso de azúcares.
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A través de una imagen ilustrativa, el IMSS indica que comer verduras y frutas naturales cada día se fortalecen tus defensas.
Retomando el tema del pan de muerto, es importante aclarar que no está prohibido comerlo, pero lo que sí se considera prohibido es exagerar en su consumo.
De acuerdo con sumédico, cada pieza, incluso las pequeñas, puede contener un aproximado de 471 calorías por cada 100 gramos de pan, e incluso alcanzar las 600 calorías por porción.
Por eso, Sandoval Bosh señala que si vamos a comer pan de muerto, lo ideal es que nuestra rebanada no sea mayor a dos dedos de grosor, ya que es esta la cantidad la que se considera adecuada para no tener repercusiones en nuestra salud.