Desde febrero de este año las apariciones de la entonces comisionada Nacional de Búsqueda (CNB), Karla Quintana Osuna, comenzaron a disminuir en las conferencias mañaneras del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando se abordaba el tema de los desaparecidos.
El punto de quiebre fue la revisión del registro de personas desaparecidas en México, que desde el año pasado superó las 100 mil. Pero no era la primera vez que la titular de la comisión, que depende de la Secretaría de Gobernación, presentaba su renuncia.
Su cargo, equivalente a sacarse la rifa del tigre, enfrentaba continúa hostilidad de la Fiscalía General de la República y la desidia de algunos gobiernos y fiscalías estatales, afirma Valentina Puga, activista por las personas desaparecidas en México.
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La integrante de la Red Eslabón por los Derechos Humanos, reconoce que ignora que llevó a Karla Quintana Osuna a presentar su renuncia a la Comisión Nacional de Búsqueda. Pero admite que había señales preocupantes, precisamente como su menor aparición en las mañaneras, donde comenzaba a ser relegada en el tema.
“Podemos suponer, solamente son interpretaciones, ahora que empezamos a atar cabos, que desde febrero para acá dejamos de ver la participación de Karla en el espacio federal. Ya ni ella ni Encinas acudían a las conferencias matutinas a dar información sobre los desaparecidos. Empezamos a darnos cuenta de que era el presidente el que decía ‘bueno, se va a hacer un nuevo censo”, explica en entrevista con La Silla Rota.
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Precisamente este tema, el de revisar las cifras de desaparecidos, que en México ya rebasan los 100 mil casos, pudo ser algo que llevó a la ahora excomisionada a presentar su renuncia, que justificó con la frase de “en virtud de los contextos actuales”, sin abundar en el tema específico al que se refería. Osuna, asumió el cargo a inicios de 2019, por lo que ya llevaba más de cuatro años al frente de la comisión.
Puga explica en qué consiste el tema del censo: “Va a ser un nuevo registro. Se va a verificar casa por casa de las personas que se supone que están desaparecidas, si es verdad que están o no están desaparecidas y entonces empezamos como a tener una sensación de que la estaban haciendo a un lado, así como a la Comisión Nacional de Búsqueda y que estaban delegando en algún otro espacio del gobierno federal la constatación, la revisión o la actualización del Registro de Personas Desaparecidas”, describe.
El censo de personas desaparecidas
Ella dice estar de acuerdo con la revisión de las cifras, porque los colectivos quieren saber la verdad al respecto. “No queremos que la cifra se disminuya o se aumente de manera arbitraria, si son mil o si son un millón, queremos saber la verdad. No es que queremos que sean más, que nos opongamos a que sean menos, solamente que los que se van eliminando del Registro Nacional de Personas Desaparecidas sea porque realmente los encontraron con o sin vida, pero porque los encontraron y no quitarlos de un plumazo”.
Puga reitera que Quintana comenzó a desaparecer cuando otros funcionarios que no eran de la CNB comenzaron a hablar del tema, diciendo que iban a ir casa por casa. Puga reconoce que es bueno que se verifique que las persona están o no desaparecidas, pero señala que ha habido quejas del proceso.
Ignora si la ex comisionada expresó su desacuerdo sobre la manera en que se comenzó a revisar el registro, pero algunos familiares de desaparecidos se quejan de que el proceso que se ha hecho sin capacitación para un tema tan delicado.
“Lo que se dijo es que abordar a las familias de personas desaparecidas requiere capacitación especializada, por ley y por el protocolo homologado de búsqueda, por lo que era un error enviar a Servidores de la Nación y otros servidores públicos que no han recibido capacitación especializada para abordar, tratar y atender a familiares de víctimas de desaparición.
“Incluso se dice que les están preguntando por teléfono y para las familias es muy impactante que la misma autoridad les llame abruptamente para preguntar algo que les remueve el sentimiento”.
CNB se deslinda de las llamadas a familiares
Lo que sí hizo la Comisión Nacional de Búsqueda fue deslindarse de esas llamadas, de las que algunas personas se quejaron por su brusquedad.
“La comisión negó que su personal tuviera instrucciones para llamarles. Cuando las familias se comunican al número del que les llamaron, resulta que es el conmutador de la Secretaría de Gobernación”, asegura Puga, quien comparte un pantallazo de prueba.
Reconoce AMLO participación de Servidores de la Nación
El presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando abordó el tema de la renuncia de Quintana, este 24 de agosto, también se refirió al censo e informó que la participación de los Servidores de la Nación continuará. Agregó que fue iniciado cuatro meses atrás y podría concluir en tres meses más.
Puga considera que decir públicamente que irán Servidores de la Nación se puede prestar a extorsiones y la oportunidad de sacar información personal de las familias.
“El día de mañana con esa información que le sacaron a la familia le generan una extorsión, agresión o delito, no nada más es enchílame una, preguntar si está o no está, es cuestión de hacer una estructura, un plan, que vea pros y contras y la posibilidad de estar generando con estas decisiones que deben ser bien pensadas y las hacen de manera simplista. En su lugar genera vulnerabilidad en familias de por sí vulneradas”, critica.
La rifa del tigre
Durante la entrevista, Puga reconoce el trabajo realizado por Karla Quintana como comisionada Nacional de Búsqueda, porque es como sacarse la rifa del tigre.
“Salvo algunas excepciones, el 90 por ciento de los colectivos de familiares de víctimas nos sentíamos muy respaldados por su esfuerzo, reconocíamos la energía de su trabajo. Siempre habrá señalamientos, algunos válidos que se puedan hacer del desempeño de las personas servidoras públicas pero la realidad es que es la rifa del tigre.
“Es un ámbito totalmente difícil la atención a las víctimas de desaparición porque podrán hacer muchas cosas las personas funcionarias y las instituciones, pero mientras una familia no encuentre, no reciba no le regresen a su ser querido para ellos es como si no se hubiera hecho nada”, puntualiza.
A contracorriente
El ámbito de desempeño para un tema así es hasta ingrato, y se necesita una persona con mucha energía, vigor y resistencia porque hay presión por todos lados, añade.
“Karla durante estos años aguantó la hostilidad de la Fiscalía General de la República, aguantó la si no hostilidad, si el azoro y la desconfianza de varios gobiernos estatales acostumbrados a que nadie se acercara a decirles que tenían que hacer las cosas de un modo diferente y una servidora pública como ella se aventó la travesía del salmón a contracorriente, finalmente llegaba a sus metas, a sus sitios donde no había nada y eso es muy difícil de encontrar en una servidora pública.
“No conocemos las causas exactas específicas de su renuncia. Sí sabemos que durante estos años en varios momentos estuvo dispuesta a renunciar, pero escuchaba nuestras opiniones de por favor, espérate, no te vayas, hay mucho que construir. Gracias a su esfuerzo, a su empuje, pues existe ahora el Mecanismo extraordinario de identificación Forense, el MEIF, así como el Centro Nacional de Identificación Humana”, continúa Puga.
“Existen las 32 comisiones de búsqueda de personas que, aunque dependen estructuralmente de la Secretaría de Gobierno de cada estado, la verdad es que muchas han podido fortalecerse, no todo lo que se requiere, pero sí el 90 por ciento de sus fortalezas han resultado de la asignación de recursos de la Secretaría de Gobernación y gran parte de ese impulso para que recibieran dinero, recapacitación partió no sólo de la CNB, sino de esa energía que Karla le infundió estos años”, afirma.
Aunque la exfuncionaria no se sometía a imposiciones, vinieran de donde vinieran, la decisión que tomó fue súbita, en un momento complejo para la búsqueda de personas. Para los colectivos fue una noticia que les causó desazón.
“Es volver a armar una estructura en tiempos borrascosos como estos momentos políticos del gobierno en México, sobre todo el gobierno federal”.
Cerró un ciclo
En su conferencia mañanera de este 24 de agosto, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre si conocía las causas de la renuncia de Quintana o si le informó razones al respecto.
Respondió que “cerró un ciclo y como somos libres…”.
También se le preguntó al primer mandatario si sabía a qué se refería Quintana con su frase del “contexto actual”, que usó en su carta de renuncia.
“Pues puede ser por el censo o la búsqueda que se está llevando a cabo en todos lados y que está participando mucha gente, muchos”.
Se dirigió a los colectivos de personas desaparecidas y les pidió no preocuparse.
“No depende de una compañera por responsable que sea, por eficaz que sea, por comprometida que sea, depende de todos y somos muchos los que estamos trabajando en esto”, dijo.
También aseguró que su administración es la que más presupuesto ha destinado al tema de atención a las personas desaparecidas.
La renuncia de Karla Quintana a la CNB no es la única controversia generada en el tema de los desaparecidos. El 21 de julio el presidente recibió a Estela de Carloto, presidenta y fundadora de las Abuelas de Mayo, organización que busca desaparecidos de la dictadura que vivió Argentina.
Pero la recepción generó molestia entre algunos colectivos mexicanos, pues el presidente no ha tenido la misma atención con madres de desaparecidos de México, que incluso en diciembre de 2021 hicieron un mitin frente a Palacio Nacional para pedir audiencia con él.
El presidente informó que será la titular de la Secretaría de Gobernación, Luisa María Alcalde, quien designe al nuevo o nueva titular de la Comisión Nacional de Búsqueda.
MRV