El titular del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer, ya no acudirá este miércoles a una reunión de trabajo ante la Comisión de Salud en la Cámara de Diputados, luego de que surgieran diversas versiones de que, tras extinguirse el instituto, ya no tendría caso.
Por la mañana, el integrante de la Comisión de Salud y diputado por Movimiento Ciudadano, Salomón Chertorivsky, explicó a La Silla Rota que hasta ese momento continuaba como parte de la orden del día. Pero, por la tarde, se reunió la Junta Directiva de la Comisión para afinar detalles, donde se decidió que el funcionario ya no acudiera.
La cita de Ferrer con las y los legisladores ocurre en dos contextos relevantes, uno porque legalmente el Congreso aprobó la extinción del Insabi (como programa estrella del gobierno de la 4T) la última semana de abril. Y aunque partidos de oposición se negaron a su extinción, esta se concretó con el voto mayoritario de los diputados y senadores oficialistas. Es por ello que se prevé que ese pudiera ser uno de los temas que sean controvertidos en la Corte como resultado de un mecanismo legislativo que ha sido cuestionado.
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El segundo contexto ocurre porque en realidad el Insabi no logró llenar las expectativas en materia de salud como planteó el presidente Andrés Manuel López Obrador al inicio de su sexenio; principalmente por el desabasto de medicinas en diferentes sectores de salud, principalmente oncológicos y psiquiátricos.
Hasta el momento se prevé que Ferrer explique los detalles del Instituto bajo su operación, ya que en los próximos seis meses se definirán las reglas para sustituir sus servicios por IMSS Bienestar a partir de 2023. Hasta ahora solo se ha referido que el Instituto contaba con los recursos, pero no con la infraestructura en materia de salud, y que por esa razón el IMSS asumirá esa tarea.
Los antecedentes
En diversos momentos Ferrer ha postergado rendir cuentas de su gestión ante el Congreso ya que desde un inicio se cuestionó su desempeño porque su experiencia no está en el ramo de salud, sino en el área arqueológica.
Según su currículum la carrera laboral de Ferrer se desarrolló en el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Llegó al Insabi porque al ser tabasqueño el presidente Andrés Manuel López Obrador lo sumó a su equipo. En aquella entidad se desempeñó como secretario de ayuntamiento y director del Sistema de Desarrollo Integral (DIF) pero sin experiencia en el ramo de salud.
Inicialmente su comparecencia estaba programada para el 5 de mayo pero esta fue reagendada para el 17.
Su última comparecencia en el Congreso fue en octubre de 2022. En aquella ocasión diputados de oposición cuestionaron los costos de compras y distribución de medicinas mediante el programa de consolidación de la ONU; pero Ferrer habló de objetivos a futuro.
Planteó que el objetivo era que los 32 estados del país se desarrollara la infraestructura necesaria para el sector salud en beneficio de la población.
Y justificó la falta de medicinas, no por desinterés del sector ni falta de recursos sino que como consecuencia de la pandemia por coronavirus.
"El mercado internacional está convulsionado y hay interrupciones en las cadenas de suministro... Para la compra de medicamentos de 2023 y 2024 hemos invertido 101 mil 600 millones para garantizar el abasto, hoy tenemos 302 proveedores adjudicados de 27 países del mundo y se ha tenido un ahorro este año por 22 mil 100 millones de pesos".
Y adelantó que para la compra consolidada de 2023 y 2024 prescindirían de los servicios de la ONU "por tener capacidad suficiente de las instituciones públicas".