Por la muerte de cinco jóvenes durante un operativo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en Nuevo Laredo, Tamaulipas, la Fiscalía General de la República (FGR) inició una carpeta de investigación.
De acuerdo con fuentes ministeriales, el expediente que integra la FGR fue abierto a partir de una denuncia que presentaron los familiares de las víctimas en la delegación de esa entidad.
Las investigaciones que realice el Ministerio Público incluirán recabar los testimonios de los militares que participaron en el operativo, incluidos los que se observan en un vídeo difundido en redes sociales.
Te podría interesar
La carpeta de investigación de la FGR se suma a la queja por oficio que inició la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por la agresión con armas de fuego a una camioneta en la que viajaban seis jóvenes.
“La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició queja de oficio por los acontecimientos ocurridos el pasado domingo 26 de febrero en la colonia Manuel Cavazos Lerma, en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde, presuntamente, elementos de la Sedena habrían accionado sus armas de fuego en contra de una camioneta en la que viajaban seis jóvenes, cinco de los cuales fallecieron a consecuencia del ataque y uno más resultó herido, así como por los enfrentamientos que se suscitaron horas después entre elementos militares y pobladores”.
El pasado fin de semana cinco jóvenes fueron asesinados y otro más tiene lesiones graves luego del supuesto ataque que llevaron a cabo elementos del Ejército en su contra.
La agresión fue denunciada por el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo y Tyler Mattiace investigador de Human Rights Watch, a través de un video subido en redes sociales en el que se observa a los militares discutiendo con habitantes.
En un comunicado, el Comité de Derechos Humanos dio a conocer el nombre de los jóvenes que fallecieron Gustavo Pérez Beriles, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Alejandro Trujillo y Gustavo Suárez Castillo, este último de origen estadounidense, mientras que Luis Gerardo se encuentra grave en un hospital privado.
“Esta nueva masacre ocurrida en esta frontera enardeció a cientos de habitantes y decenas de familiares de las víctimas que enfrentaron al personal militar, incluso a golpes, por considerar que las víctimas no estaban armadas ni había motivo para que les privaran de la vida en forma arbitraria”, se lee en el documento.
Hasta el momento la Sedena no ha dado un posicionamiento sobre la supuesta agresión que realizaron militares en contra de los seis jóvenes, cinco de los cuales perdieron la vida.