Desde que los talibanes retomaron el poder en 2021, las mujeres afganas enfrentan un retroceso sin precedentes en sus derechos, especialmente en el ámbito laboral, de acuerdo con estimaciones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), las restricciones impuestas han reducido en 2,000 millones de dólares el Producto Interno Bruto (PIB) nacional y desplomado el ingreso per cápita de los hogares casi a la mitad.
La tasa de empleo en mujeres es de apenas el 7 % en 2023, los pequeños negocios dirigidos por mujeres se han convertido en una de las pocas vías de sustento disponibles. Hoy, representan una red vital de resiliencia, solidaridad y autonomía para miles de mujeres en un entorno cada vez más hostil.
Resistir, crear y sostener
A pesar de las prohibiciones para trabajar, viajar sin acompañante masculino o incluso vestir con libertad unas 80,000 microempresas lideradas por mujeres han recibido apoyo del PNUD desde 2022, generando más de 400,000 empleos. Muchas de estas empresas operan desde casa, como el restaurante de Susan en Qala-e-Naw o el taller de alfombras de Shirzoy, quien dice que volver a trabajar "le devolvió la esperanza".
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“Trabajar con otras mujeres ha mejorado mi salud mental”, afirma Shirzoy. “Incluso recibimos pedidos internacionales”.
Obstáculos
La Ley de Moralidad de 2024 impuso nuevas restricciones que dificultan la comercialización y elevan los costos. Una encuesta reciente del PNUD revela que el 76 % de las empresarias tiene la firme determinación de seguir adelante, pese a obstáculos como la falta de acceso a crédito, códigos de vestimenta obligatorios o segregación de género en sus espacios laborales.
Espacios de libertad
En zonas rurales como Pashtun Zarghun, centros comunitarios capacitan a mujeres en costura, bordado y tejido como vía hacia la autonomía económica. “Este espacio nos permite trabajar libremente”, dice Mozghan, una de las beneficiarias.
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Aun en medio de la represión, las mujeres afganas demuestran que con apoyo, formación y oportunidades, pueden transformar sus hogares en espacios de resistencia y construir futuro.
kach