Desde el comienzo de la guerra en Ucrania, grupos vinculados al gobierno chino han estado hackeando repetidamente empresas y organismos gubernamentales rusos en una aparente búsqueda de secretos militare, asegura el medio estadounidense The New York Times.
Estas intrusiones comenzaron a intensificarse en mayo de 2022, solo unos meses después de la invasión rusa de Ucrania, y han continuado de forma constante, afirma el medio estadounidense.
Esto ocurre a pesar de la proclamada "asociación sin límites" y las promesas de no hackearse mutuamente entre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el presidente de China, Xi Jinping. Sin embargo, la campaña de hacking demuestra que China ve a Rusia como un objetivo vulnerable.
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Según el NYT, los ciberanalistas sugieren que China ve la guerra en Ucrania como una oportunidad para recopilar información sobre las tácticas de guerra modernas, el armamento occidental y lo que funciona contra ellos. Esto se debe a que los expertos militares chinos a menudo lamentan la falta de experiencia de sus tropas en el campo de batalla.
China busca reunir inteligencia sobre las actividades de Rusia, incluyendo su operación militar en Ucrania, desarrollos de defensa y otras maniobras geopolíticas, afirmó uno de los investigadores entrevistados por el NYT, mientras que otro agregó que la guerra en Ucrania "cambió fundamentalmente las prioridades de inteligencia de ambos países".
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El objetivo de China afirman, es aprender de la experiencia bélica de Rusia para reforzar su propia preparación ante posibles conflictos futuros, especialmente en relación con Taiwán.
Aunque los funcionarios rusos no han reconocido públicamente estas intrusiones, un documento clasificado de contrainteligencia de la agencia de seguridad nacional rusa (FSB), obtenido por The New York Times, revela la preocupación de los funcionarios de inteligencia, refiriéndose a China como un "enemigo".
El documento indica que China busca experiencia y tecnología de defensa rusa, y está tratando de aprender de la experiencia militar de Rusia en Ucrania. La guerra de drones y su software son de especial interés para China.
Entre los ataques específicos, se han identificado varios incidentes:
- En 2023, un grupo conocido como Sanyo usurpó direcciones de correo electrónico de una importante empresa de ingeniería rusa en busca de información sobre submarinos nucleares.
- Otro grupo financiado por el gobierno chino tuvo como objetivo a Rostec, el poderoso conglomerado estatal ruso de defensa, buscando información sobre comunicaciones por satélite, radares y guerra electrónica.
- También se han utilizado archivos maliciosos, diseñados para explotar vulnerabilidades de Microsoft Word, para penetrar en objetivos de la industria aeronáutica y organismos estatales rusos.
Aunque no todos los hackers chinos actúan a instancias del gobierno, expertos en seguridad señalan que existen indicios de vínculos gubernamentales. La empresa rusa de ciberseguridad Positive Technologies reportó en 2023 ataques contra objetivos rusos en los sectores aeroespacial, de seguridad privada y de defensa.
Los ataques habrían sido gestados con la herramienta conocida como Deed RAT, considerada "patentada" entre los hackers chinos patrocinados por el Estado. Esto, dado que no está disponible para su compra en la dark web.
Especialistas señalan que el ataque de hackers chinos a Rusia no inició con la guerra en Ucrania, sino en 2021 con un ciberataque en 2021 dirigido a diseñadores de submarinos rusos, pero la guerra sí provocó un repunte de las intrusiones informáticas.
Ofensiva cibernética china a otros países del mundo
Más allá de Rusia, los grupos de hackers chinos patrocinados por el Estado a menudo han tenido como objetivo empresas internacionales e instituciones gubernamentales, incluidas las de Estados Unidos y Europa.
Expertos en seguridad nacional y tecnología denuncian que grupos vinculados al ejército y al servicio de inteligencia de China han apuntado a los teléfonos inteligentes de estadounidenses prominentes y se han infiltrado profundamente en las redes de telecomunicaciones.
Investigadores de la firma iVerify notaron una "falla de software altamente inusual" que afectaba a un pequeño número de teléfonos de personas en el gobierno, la política, la tecnología y el periodismo a finales de 2024 y principios de 2025. Estas fallas fueron señal de un sofisticado ciberataque que podría haber permitido a los hackers infiltrarse en un teléfono sin un solo clic del usuario.
Las víctimas trabajaban en campos de interés para el gobierno de China y habían sido objetivo de hackers chinos en el pasado. Esto evidencia la vulnerabilidad de los dispositivos móviles y las aplicaciones, y el riesgo de que las vulnerabilidades puedan exponer información sensible o dejar los intereses estadounidenses abiertos a ciberataques.
Rocky Cole, ex experto en ciberseguridad de la Agencia de Seguridad Nacional y Google, afirmó que el "mundo está en una crisis de seguridad móvil en este momento" y que "nadie está vigilando los teléfonos".
Las autoridades estadounidenses advirtieron en diciembre sobre una "extensa campaña de hacking china" diseñada para acceder a los textos y conversaciones telefónicas de un número desconocido de estadounidenses.
El representante Raja Krishnamoorthi declaró que los hackers "fueron capaces de escuchar llamadas telefónicas en tiempo real y de leer mensajes de texto". Los hackers chinos también buscaron acceso a los teléfonos utilizados por Donald Trump y su compañero de fórmula JD Vance durante la campaña de 2024.
El gobierno chino, por su parte, ha negado las acusaciones de ciberespionaje y ha acusado a Estados Unidos de montar sus propias operaciones cibernéticas. Sin embargo, funcionarios de inteligencia de Estados Unidos han dicho que China representa una amenaza "significativa y persistente" para los intereses económicos y políticos de Estados Unidos.
Las redes móviles son una preocupación principal, con Estados Unidos y muchos aliados prohibiendo a las empresas de telecomunicaciones chinas en sus redes debido a preocupaciones de seguridad.
Las empresas chinas de telecomunicaciones aún mantienen algunos sistemas de enrutamiento y almacenamiento en la nube en Estados Unidos, lo que preocupa cada vez más a los legisladores. El representante John Moolenaar expresó que "el pueblo estadounidense merece saber si Beijing está utilizando silenciosamente empresas estatales para infiltrarse en nuestra infraestructura crítica".
Los dispositivos móviles se han convertido en una gran fuente de información, y su proliferación a menudo ha superado su seguridad. Los teléfonos de altos funcionarios son especialmente valiosos, ya que contienen información gubernamental sensible, contraseñas y una visión interna de las discusiones y toma de decisiones políticas.
Se mencionan casos como Susie Wiles, jefa de gabinete de Trump, cuyos contactos fueron aparentemente accedidos, o el exasesor de seguridad nacional Mike Waltz, quien agregó inadvertidamente a un editor en jefe a un chat de Signal militar. Pete Hegseth, secretario de Defensa de Estados Unidos, tenía una conexión a internet que eludía los protocolos de seguridad del Pentágono para usar Signal en una computadora personal.
Aunque la mayoría de los teléfonos inteligentes y tabletas tienen una seguridad robusta, las aplicaciones y dispositivos conectados a menudo carecen de protecciones o actualizaciones de software regulares, convirtiendo cada rastreador de fitness, monitor de bebé o electrodoméstico inteligente en un posible punto de entrada para hackers.
Un ejemplo extremo es la preocupación de los investigadores que lograron hackear el micrófono de una versión conectada digitalmente de la muñeca Barbie. Además, la seguridad de un dispositivo no importa si el usuario no sigue precauciones básicas, especialmente con información clasificada o sensible.
La guerra pasa factura a Rusia; reconocen riesgo de recesión
A pesar del optimismo mostrado por el presidente ruso, Vladimir Putin, el ministro de Economía de Rusia, Maxim Reshétnikov, admitió que el país se encuentra "al borde de una recesión".
Durante el Foro Económico Internacional en San Petersburgo, Reshétnikov afirmó que "las cifras muestran un enfriamiento y la percepción actual sugiere que ya estamos al borde de una recesión". Agregó que "el número de empresas en riesgo está aumentando".
El ministro también le pidió "un poco de cariño por la economía" a la directora del Banco Central ruso, Elvira Nabiúllina, quien ha mantenido una dura política de altos tipos de interés para bajar la inflación.
Por su parte, Elvira Nabiúllina, directora del Banco Central ruso, confesó que muchos recursos para el crecimiento del actual modelo económico ruso "se han agotado".
Si bien Rusia creció a un ritmo bastante alto durante dos años gracias a la libertad en el uso de recursos como fuerza laboral, capacidad de producción, sustitución de importaciones y recursos acumulados del presupuesto del Fondo Nacional del Bienestar y la reserva del capital bancario, Nabiúllina enfatizó la necesidad de "pensar en un nuevo modelo económico".
En contraste, el ministro de Finanzas, Antón Siluánov, defendió que el modelo actual "todavía es viable" y abogó por la soberanía tecnológica, afirmando que "Rusia crece a un ritmo notable mientras nos rodean las sanciones". Él sostuvo que "después del enfriamiento viene el verano".
Actualmente, la economía rusa se ha estancado por la falta de inversión, consecuencia de los altos tipos de interés. Estos tipos, que este mes bajaron del 21% al 20%, también han provocado la quiebra de una importante cantidad de empresas que no podían solicitar créditos. Anatoli Popov, portavoz del Sberbank, declaró que las inversiones se reavivarían si los tipos de interés se reducen a entre un 12% y 14%.
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A pesar de estas admisiones, Putin ha mantenido su optimismo en sus últimas comparecencias sobre la economía. Aunque admitió que el crecimiento de este año sería menor que el anterior, siempre ha hablado de crecimiento y resistencia a las sanciones internacionales. A finales de mayo, se jactó de que Rusia "ocupa el cuarto lugar a nivel mundial en términos de paridad de poder adquisitivo", insistiendo en esta idea recientemente.
VGB
