La Policía Nacional de Perú (PNP) detuvo este viernes en Lima a Cristian Hernán Yong Granadino, conocido como “Chuki”, fugitivo incluido en la lista de los más buscados por Europol y requerido por la Justicia española por el asesinato de la adolescente Silvia Rodríguez Fernández, cometido en 2010 en Leganés (Madrid). El arresto pone fin a 15 años de huida, durante los cuales el sospechoso permaneció oculto en Perú bajo una identidad falsa.
La detención se llevó a cabo este viernes a las 14:00 hora local (19:00 GMT) en el distrito de Lurín, al sur de la capital peruana. Según informó la Policía Nacional en un comunicado oficial, el operativo fue ejecutado por la Dirección de Investigación de Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes, con el apoyo de Interpol Lima, que verificó que el fugitivo utilizaba un documento de identidad falso para evitar ser localizado.
“El sujeto es responsable del asesinato de la menor Silvia Rodríguez Fernández (16 años), en Leganés (España), crimen que generó gran conmoción internacional. Tras permanecer prófugo por 15 años bajo una identidad falsa en Perú, fue finalmente ubicado gracias a labores de inteligencia y verificación biométrica”, señaló la PNP.
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Las autoridades explicaron que, durante años, se intensificaron las labores de observación, vigilancia y seguimiento, hasta dar finalmente con el paradero del prófugo.
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Un asesinato que conmocionó a España
El crimen de Silvia Rodríguez ocurrió el 10 de noviembre de 2010. La notificación roja de Interpol para su búsqueda y captura fue emitida seis días después, el 16 de noviembre, cuando ya se sospechaba que el autor había huido de España.
Según la investigación policial española, Silvia conoció a Granadino cuando ella tenía 14 años y él 28. Testimonios del entorno de la joven describieron una relación “marcada por el maltrato”.
“En octubre de 2010, semanas antes del crimen, Silvia decidió terminar con él tras soportar episodios de violencia física”, indica el comunicado policial.
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La noche del crimen
La adolescente fue vista por última vez junto a una amiga. Su cuerpo apareció al día siguiente, dentro de una maleta abandonada en un contenedor de basura, hallado por una persona sin hogar. En la escena se encontró ADN del presunto homicida, consolidando la principal línea de investigación.
Las autoridades españolas determinaron que Granadino había comprado un billete de avión a Lima antes del asesinato, con el objetivo de abandonar el país el mismo día del crimen. De acuerdo con la PNP, el fugitivo logró permanecer oculto durante 15 años adoptando otro apellido y evitando registros oficiales.
Con la captura confirmada, se espera que España formalice el proceso de extradición, dado que Granadino está requerido por un delito de asesinato con múltiples agravantes. Europol y la Policía Nacional española han sido notificadas de la detención.
La resolución del caso, tras década y media de búsqueda, supone un avance significativo para la familia de la víctima y para las autoridades que, durante años, mantuvieron abierto un dispositivo de cooperación internacional.
AJA