A menos de seis meses para las elecciones presidenciales, el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, propuso este jueves una norma que agilizará el rechazo de asilo a migrantes considerados un peligro para "la seguridad nacional o pública". Esto, como una medida para mejorar la seguridad fronteriza.
De acuerdo con la norma propuesta, los funcionarios podrían rechazar solicitudes de asilo a los pocos días de encontrar a un migrante cuando haya evidencia de que representa un riesgo para la seguridad nacional o pública.
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"La regla propuesta que hemos publicado hoy es un paso más en nuestros esfuerzos continuos para garantizar la seguridad del público estadounidense identificando y eliminando más rápidamente a aquellas personas que presentan un riesgo de seguridad y no tienen base legal para permanecer aquí", dijo el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en un comunicado.
Lo anterior, lo dio a conocer el Departamento de Seguridad Interior (DHS), quien anunció que los funcionarios de asilo tendrían que considerar si un solicitante podría “reubicarse razonablemente en otra parte del país donde se teme persecución al evaluar las solicitudes” según las directrices revisadas.
"Hemos tomado una serie de medidas para ampliar nuestro uso de la autoridad y los recursos ejecutivos para abordar lo que estamos viendo en nuestra frontera y, en realidad, en todo el hemisferio", dijo a los periodistas un alto funcionario de Seguridad Nacional, citando la inacción del Congreso.
¿Cómo funcionará la nueva norma?
Cabe destacar que hasta ahora, los migrantes considerados como un riesgo para la seguridad nacional o pública permanecen bajo custodia del DHS mientras sus casos son emitidos a los jueces de inmigración, un proceso que puede extenderse durante años y es costoso.
No obstante, el Departamento de Seguridad explicó que la nueva regla permitirá denegar las solicitudes en cuestión de días si hay pruebas de que se les puede rechazar por motivos de "terrorismo, seguridad nacional o penales". Esta determinación se realizaría al comienzo del proceso durante las entrevistas de miedo creíble, donde los funcionarios evalúan si existe la posibilidad de persecución o tortura si la persona regresa a su país.
La norma, que se publicará el lunes, todavía necesita pasar por un periodo de comentarios públicos antes de entrar en vigor a finales de este año. Sin embargo, podría sufrir cambios antes de entrar en vigor, "es un paso más en nuestros esfuerzos continuos para garantizar la seguridad" de los estadounidenses, afirmó Mayorkas.