Este próximo sábado 6 de mayo, Carlos III será coronado rey en una ceremonia histórica que tendrá lugar en el Palacio de Buckingham. La emblemática coronación contará con el mismo trono de madera de roble báltico utilizado por primera vez en la ceremonia de coronación del rey Eduardo II en 1307.
El Trono de San Eduardo, encargado en 1296 por Eduardo I, albergará la Piedra de Scone, uno de los símbolos más importantes en la historia británica. Esta piedra fue capturada en la Abadía de Scone tras la derrota de los escoceses y ha sido un elemento central en las ceremonias de coronación desde el siglo XIV.
En 1996, la Piedra de Scone fue devuelta a Escocia para su exhibición en el Castillo de Edimburgo, con la condición de que sea retornada para futuras coronaciones. El histórico bloque de arenisca llegó a la capital británica desde Escocia el sábado pasado, listo para ser utilizado en la próxima ceremonia.
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No obstante, el Trono de San Eduardo será solo uno de los asientos empleados en el evento. De acuerdo con un comunicado de Buckingham, los reyes Carlos y Camila utilizarán diversas Sillas de Patrimonio, Tronos y Sillas de Congregación durante la ceremonia.
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El Palacio de Buckingham señaló que, en pro de la sostenibilidad, Sus Majestades optaron por emplear sillas y tronos de la Colección Real previamente utilizados en coronaciones pasadas. Estos han sido preservados, restaurados y adaptados según sea necesario.
Las Sillas de Patrimonio, fabricadas en 1953 para la coronación de Isabel II, madre del nuevo monarca, serán empleadas en la coronación de la reina Camila y al inicio de la ceremonia. Estas sillas de madera de haya bañada en oro tienen un gran valor histórico. Por otra parte, los conocidos Tronos para la Entronización y el Homenaje, fueron creados para la coronación de Jorge VI e Isabel, padres de la madre del actual monarca, esto en el año de 1937.
Además, se utilizarán alrededor de cien Sillas de la Congregación, cubiertas de terciopelo azul, en la Abadía de Westminster durante la ceremonia del próximo sábado. Esta histórica coronación, que marca el inicio de un nuevo reinado, promete ser un evento inolvidable para la nación británica.
Contexto
Carlos III, antes conocido como el Príncipe de Gales, será coronado Rey en los próximos días. Hijo de la Reina Isabel II y el Príncipe Felipe, nació el 14 de noviembre de 1948. A sus 74 años, gobernará el Reino Unido y 14 estados soberanos de la Mancomunidad de Naciones.
Carlos III, heredero al trono desde 1952, es conocido por su conexión con la naturaleza, su habilidad en jardinería, buen humor y talento como pintor. Estudió arqueología, antropología e historia en el Trinity College de Cambridge, y posteriormente se unió a la Royal Air Force. Además, fundó la organización benéfica Prince's Trust en la década de los 70 y ha estado involucrado en más de 400 organizaciones benéficas.
Carlos tuvo dos hijos con la difunta Lady Diana Spencer, los Príncipes Guillermo y Enrique. Años después, se casó con Camila Parker-Bowles en 2005. Desde la muerte de la Reina Isabel II, el título de Príncipe de Gales pasó a su hijo mayor, Guillermo, y su esposa Catalina Middleton asumió el título de Princesa de Gales.
La riqueza personal de Carlos III se estima en alrededor de 2 mil 200 millones de dólares, incluyendo joyas, bienes raíces, acciones, inversiones, caballos de carreras, obras de arte y automóviles de colección. Gran parte de esta fortuna fue heredada de su madre, la Reina Isabel II.
A lo largo de su vida, Carlos ha luchado por la conservación del medio ambiente y ha recibido varios reconocimientos por su labor en esta área. También ha escrito más de 20 libros sobre diversos temas, como política, religión, cambio climático, historia y literatura.
La Familia Real británica ha trabajado en los últimos años para construir una imagen más accesible de Carlos III, aunque parte de la ciudadanía no se identifica con él. A pesar de sus logros y esfuerzos, muchos lo ven como alguien con poco carisma. Con su coronación oficial a la vuelta de la esquina, el reinado de Carlos III promete ser una nueva etapa en la historia del Reino Unido. Su legado como líder y activista medioambiental será crucial para enfrentar los retos y desafíos que se avecinan en el futuro.
CON INFORMACIÓN DE EFE.
DJC