Este martes 15 de noviembre, se dio a conocer la noticia de que los republicanos ganaron el control de la Cámara de Representantes por un estrecho margen, en el que los republicanos han conceguido hacerse con 218 escaños, con lo cual ahora tiene control sobre la Suprema Corte de Justicia, 25 gubernaturas, además de la Cámara de Representantes.
Los republicanos lograron este triunfo sobre los demócratas, tras conseguir arrebatarles 9 asientos de la Cámara de Representantes, con lo que el control del legislativo estadounidense se encontrara dividido entre ambos partidos, los republicanos controlaran la cámara baja, y los demócratas la cara alta.
Esta victoria de los republicanos llega tras la derrota ante los demócratas en la cámara alta, el pasado sábado 13 de noviembre, cuando se dio a conocer que los demócratas habían conseguido la mayoría de escaños de la cámara alta.
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El triunfo republicano en la cámara baja
Por la mañana de este martes, ya se anunció que el partido republicano ya se encontraba a tan solo un escaño de lograr la mayoría en la Cámara de Representantes, con lo cual, ya se preveía que conseguirían arrebatarles su control a los demócratas, y dificultar la agenda legislativa del presidente Baiden, para los próximos dos años, a espera de las elecciones presidenciales.
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De acuerdo con algunos medios estadounidenses, durante la mañana de este martes, los republicanos ya contaban con 217 escaños asegurados, y quedaban a la espera de conseguir uno más para conseguir llegar a los 218 que se necesitan para asegurar la mayoría de lugares en la Cámara de Representantes.
Por la tarde, se hizo oficial que los republicanos habían conseguido hacerse con otro de los escaños de los 13 que aún faltaban por ser asignados, con este, consiguieron llegar a los 218 lugares que les garantizan el control de la cámara baja.
De los trece escaños que aún faltaban por liberarse, los republicanos llevaban la delantera en 4 de ellos, por lo que el triunfo de los republicanos en la cámara baja, estaba hasta cierto punto previsto.
Con esta victoria, la demócrata Nancy Pelosi dejará de ser presidenta de la Cámara de Representantes, ante lo que ya se proyecta al republicano Kevin McCarthy como nuevo líder de la Cámara de Representantes.
Ahora los republicanos tomaran las decisiones en lo que respecta a la política fiscal, y el gasto público estadounidense.