EMPRESAS DE SEGURIDAD PRIVADA

Es vigilante y limpia casas: “El sueldo de un guardia no alcanza para vivir”

El sueldo promedio de una persona que trabaja como guardia de seguridad ronda entre 3 mil 800 y 4 mil 400 pesos quincenales, poco más del salario mínimo

Los guardias de seguridad trabajan turnos continuos de 24 horas por otras 24 de defensa.Créditos: Raúl Estrella / La Silla Rota
Escrito en METRÓPOLI el

Evelin se levanta a las 3:30 de la madrugada para cumplir con una jornada laboral que no termina oficialmente hasta pasadas las ocho de la noche del día siguiente. Es guardia de seguridad privada y trabaja turnos de 24 horas por 24 de descanso. Gana 4 mil 400 pesos cada quincena, pero sus días “libres” los ocupa en limpiar casas particulares para sobrevivir.

Es poco el sueldo", reconoce, “pero me permite estar unas horas con mis hijos".

A sus 25 años, Evelin vive en Los Héroes Chalco Cupido, en el Estado de México, zona que se inundan con las lluvias, en la que el transporte público es caro y poco eficiente. “Tengo que salir a más tardar a las cuatro, por muy tarde 4:15. Si no, no llego”, cuenta mientras repasa la cadena de transbordos que realiza cuatro veces a la semana: combi, camión, Metro, transbordo y Metro. En total, casi cuatro horas en el transporte público.

A Evelin Michelle Contreras Castillo, la identifican como ID36 en su trabajo, gana 8 mil 800 pesos al mes como guardia de seguridad y otros 4 mil 800 limpiando casas.

Sin embargo, más del 80 por ciento de su ingreso se va en transporte, renta y colegiatura de la escuela particular de su hijo mayor, diagnosticado con autismo. “De la escuela son 3 mil 200 pesos al mes”, explica a La Silla Rota “Y la renta la pagamos entre mi papá y yo, 3 mil 600 en total”. Cuando se le pregunta si logra ahorrar, su respuesta es directa: "No".

"Duermo más en el transporte que en mi cama"

Después de cumplir su turno de 24 horas como guardia de seguridad, de ocho de la mañana a la misma hora del día siguiente, Evelin no descansa.

De inmediato, corre hasta una casa particular cerca de Plaza Tepeyac, en la alcaldía Gustavo A. Madero, en la que realiza labores de limpieza durante cuatro o cinco horas. Le pagan 400 pesos por jornada. Con eso completa lo que el sueldo de guardia no cubre.

Al terminar, inicia otro largo trayecto, ahora de regreso hasta su casa en Los Héroes Chalco Cupido. Entre caminatas, Metro y otro camión, se le van al menos dos horas y media más. A veces llega a las 17:30, otras pasadas las 18:00 horas. Para entonces, ha estado fuera de su casa alrededor de 38 horas.

Sus hijos ya están en casa, salieron de la escuela por la mañana y fueron cuidados por sus abuelos. Evelin apenas alcanza a estar con ellos un par de horas. Revisa tareas, les da de cenar, los baña y los acuesta. Luego, lava ropa o limpia su propio hogar.

En promedio, Evelin duerme entre cuatro y cinco horas por noche. “Duermo más en el transporte que en mi cama”, dice. “Pero si no trabajo también limpiando casas, no me alcanza”.

A pesar de todo, Evelin se aferra a su trabajo.

"En otro trabajo de ocho horas estaría peor, porque prácticamente sería irme cuando mis hijos están durmiendo y regresar cuando ya se fueron a dormir”.

Su turno actual, dice, le permite estar con ellos por la tarde cada tercer día, ayudarles con la tarea y atender las necesidades de su hijo en terapias médicas especializadas.

“Corremos mucho riesgo”

Evelin lleva cinco años trabajando como guardia de seguridad, cuidando tiendas de mascotas o edificios de departamentos, dependiendo de lo que se le asigne.

Actualmente es la encargada de su turno y trabaja en un conjunto habitacional ubicado en una colonia de la Ciudad de México. Puede dormir un par de horas por la madrugada, si la noche lo permite, pero el resto del tiempo debe permanecer atenta.

“No sabemos si las personas que llegan son en realidad visitas o si vienen con otras intenciones", explica sobre su trabajo, que considera riesgoso.

Sin embargo, en el tiempo que lleva como guardia de seguridad, no ha tenido incidentes graves, aunque alguna vez recibió una llamada de extorsión cuando trabajaba para otra empresa. “Se hicieron pasar por un dueño de departamento. Pero me comuniqué con el supervisor, se reportó y no pasó nada”.

Aunque no ha sufrido agresiones, sí ha tenido que enfrentar los desprecios cotidianos de los mismos vecinos que se esfuerza en proteger. “Hay residentes que ni los buenos días contestan. Una vez una señora le gritó a un compañero: ‘por mí comes’”. Evelyn guarda silencio unos segundos y añade: “Yo trato de hacer mi trabajo lo mejor posible, pero también merecemos respeto”.

Fuente: Inegi

Poco más del mínimo

En México, el salario base de un guardia de seguridad privada ronda entre 3 mil 800 y 4 mil 400 pesos quincenales, de acuerdo con Omar Gutiérrez, representante de la empresa de seguridad DAROMI.

Este salario apenas supera el salario mínimo, que en 2025 equivale a 8 mil 480.17 pesos mensuales en casi todo el país. Sin embargo, los guardias suelen trabajar bajo el esquema de 24 por 24; es decir, 15 turnos al mes o un total de 360 horas trabajadas.

Quien gana 8 mil 800 pesos mensuales en esas condiciones recibe en promedio 24.4 pesos por hora, mientras que en un trabajo informal, como la limpieza de casas se puede obtener 400 pesos por cinco horas; es decir, 80 pesos por hora.

En zonas como Polanco o Huixquilucan, los sueldos pueden subir a 4 mil 800 o 5 mil pesos quincenales y, en servicios con portación de arma, hasta 8 mil pesos quincenales. “Todo depende de lo que pague el cliente”, señala Gutiérrez en entrevista con La Silla Rota.

Omar Gutiérrez, quien lleva más de 10 años en este negocio, asegura que su empresa otorga prestaciones de ley a sus elementos, aunque reconoce que muchas empresas no lo hacen. “Son empresas patito”, dice, porque ni siquiera gestionan el permiso anual que exige la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la CDMX para operar legalmente.

Esta autorización cuesta 18 mil 744 pesos al año y requiere que la empresa esté constituida, entregue documentación oficial y acredite controles de seguridad.

Ante esta precariedad, muchas guardias de seguridad, como Evelin, se ven forzadas a trabajar también en otros oficios.

Casi un millón de guardias de seguridad en México

En 2024, en México había 6 mil 362 empresas de seguridad privada registradas, de acuerdo con el Censo Nacional de Seguridad Pública Estatal (CNSPE) del INEGI. La cifra representa un aumento del 2.01% respecto al año anterior y continúa una tendencia de crecimiento constante en el sector desde 2010.

La Ciudad de México encabeza la lista con mil 195 empresas registradas, lo que representa casi una de cada cinco en todo el país. Le sigue Nuevo León, con 569 empresas y el Estado de México con 491, entidad donde en los últimos tres años se ha registrado un incremento importante en empresas enfocadas en la vigilancia de bienes.

En el resto del país, otras entidades con alta concentración de empresas de seguridad privada son Baja California (338), Chihuahua (269) y Puebla (254). En contraste, estados como Sinaloa (73), Zacatecas (69) y Tlaxcala (62) reportan el menor número de compañías registradas.

Del total nacional, la mayoría de las empresas se dedican a la protección de bienes e inmuebles, seguidas por aquellas enfocadas en la custodia de personas, traslado de valores, monitoreo remoto y manejo de alarmas.

En total, estas empresas emplean, según el INEGI, a más de 122 mil personas. Sin embargo, la Secretaría de Economía estima que más de 888 mil personas en México trabajan como guardias de seguridad.

De ellas, sólo 16.6 % son mujeres, la mayoría de ellas entre 35 y 44 años.

Evelin es parte de ese 16.6 %. Tiene 25 años, dos hijos y jornadas que superan las 36 horas continuas entre trabajo y trayectos. Su sueldo no le alcanza, pero se aferra al uniforme: “Me deja poco dinero, pero me deja ver a mis hijos”.