El director de la Policía municipal de Nicolás Romero, Adrián Mauricio Sánchez Mitre, es buscado por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) por su presunta participación en una red criminal ligada con el homicidio de al menos de 16 personas en el Estado de México.
Por los hechos, investigados desde abril, se cuenta con las órdenes de aprehensión de siete personas prófugas, entre ellas el director policiaco, cuatro elementos de seguridad y dos presuntos criminales identificados con los alias “El 50” y “El 24”, que son objetivos prioritarios; la FGJEM confirmó que se encuentran detenidas 21 personas, entre ellas 10 policías de Nicolás Romero y 11 presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)
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Investigación en proceso
Las investigaciones iniciaron por denuncias presentadas por la desaparición de personas desde el pasado mes de abril, lo que derivó en inspecciones en pozos de la colonia El Mirador, en Nicolás Romero, donde fueron localizados los cuerpos de 10 personas y otros seis en diferentes puntos del municipio.
“El pasado 22 de abril, esta Fiscalía inició, junto con la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de México (COBUPEM), Célula de Búsqueda de Nicolás Romero y los Servicios de Urgencias del Estado de México (SUEM), acciones de búsqueda derivadas de denuncias por desaparición, con lo que ubicó en un predio ubicado en la colonia El Mirador, Nicolás Romero, restos humanos, algunos de ellos segmentados, que luego de los dictámenes periciales correspondientes se pudo establecer que correspondían a 10 víctimas”, informó en un comunicado la FGJEM.
Las diligencias en campo se iniciaron el 22 de abril, luego de que fue localizada una excavación identificada como “Pozo Uno”, cuyas dimensiones aproximadas son de cuatro metros de diámetro por 40 de profundidad, donde fueron encontrados restos humanos correspondientes a seis cuerpos, por las prendas de vestir que portaban y por la información de los boletines de búsqueda, se estableció coincidencia con cuatro masculinos previamente reportados como desaparecidos y que eran conductores de servicio de transporte público por aplicación.
Posteriormente, el 23 de abril se continuaron las labores de búsqueda en esa misma excavación y fueron localizados restos humanos, incluidas extremidades cefálicas, el hallazgo corresponde a tres cuerpos adicionales. Tras concluir las labores de búsqueda en el “Pozo Uno”, se efectuó una revisión en la zona localizando a 300 metros de ese sitio, otra excavación identificada como “Pozo Dos”, en donde se rescató un cuerpo más.
A los restos localizados se les practicaron diversos dictámenes periciales, entre ellos, acta médica, necropsia y genética, lo que permitió establecer que la totalidad de las víctimas correspondían al sexo masculino y que la causa de muerte se debió a traumatismo craneoencefálico severo, contusión y traumatismo profundo de tórax, luxación occipitoatloidea y laceración de paquete neurovascular, entre otras.
También se estableció que ninguna de las víctimas fue privada de la vida por disparo de arma de fuego y algunas de ellas presentaban signos de tortura, de los indicios con los que se cuenta incluyendo imágenes extraídas de dispositivos móviles, se logró establecer que algunas víctimas fueron arrojadas con vida. Hasta el momento han sido identificados y restituidos a sus familiares los restos de nueve personas.
Por estos hallazgos, la FGJEM identificó una red delictiva que operaba en Nicolás Romero y zonas aledañas, la cual sería responsable de estos hechos, así como de la comisión de otros homicidios y diversos ilícitos en esta zona.
Las primeras detenciones se realizaron el pasado 26 de abril, en un operativo con elementos de la FGJEM, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), CONAHO, CONASE y Guardia Nacional, el cual tuvo como resultado la detención en flagrancia de siete sujetos, por su probable intervención en la comisión de delitos contra la salud y presuntos integrantes de un grupo delictivo relacionado con un grupo criminal con orígenes en Jalisco y quienes recibían instrucciones desde el interior del penal de Barrientos, por parte del recluso identificado como "El Davi’s".
Las investigaciones continuaron y hasta la fecha han sido detenidos y vinculados a proceso 21 presuntos responsables, entre ellos 10 policías municipales de Nicolás Romero.
Aún falta por detener a, por lo menos, otros siete implicados en esta investigación, entre los que se encuentra quien fungía como director de la Policía municipal, Adrián Mauricio Sánchez, cuatro uniformados y dos integrantes de la red criminal, quienes cuentan con orden de aprehensión.