“Ejercer el voto es una forma de que nos miren, de ser incluidos, pienso que muchos lucharon para que tengamos este derecho”, expresó Adelina Sereno Villaseñor, una maestra con discapacidad visual que, como muchos otros, aplaude la distribución de las boletas en braille por parte del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) con las que pueden acudir de forma independiente a las urnas y asegurar la discrecionalidad de su elección.
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La mujer de 54 años recuerda que desde que cumplió la mayoría de edad ha participado en este ejercicio democrático, pero al perder la vista, a los 29 años, necesitaba la ayuda de alguien para ejercerlo. Ella tenía 40 años, cuando en el Estado de México se implementaron por primera vez las plantillas en sistema braille y, a partir de entonces, pudo escoger de forma independiente a sus candidatos y candidatas a algún cargo de elección popular.
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“Se siente bien esto de ser mirado (…) de decir: ahora sí me siento libre. Claro que nunca fui condicionada, pero era diferente que te lleven el dedo y te digan: es aquí, a que tú con tus dedos leas la plantilla y vas detectando y eliges”, señaló.
En todas las casillas se contará con plantilla en sistema braille
El IEEM informó que, en la próxima jornada electoral, cada una de las 20 mil 979 casillas instalada en territorio mexiquense contará con una plantilla en sistema braille, mampara especial, etiqueta para urnas, entre otras herramientas que faciliten y garanticen el libre ejercicio del voto a las personas con discapacidad.
Adelina es maestra de manualidades en “Vemos con el Corazón”, una institución de asistencia privada que brinda atención, a través de cursos y talleres, a personas con discapacidad visual. Debido a sus responsabilidades con los alumnos y alumnas, ella prefirió no participar como observadora electoral.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en la entidad mexiquense viven 45 mil 103 personas con discapacidad visual; por ello, Adelina Sereno señaló que, aunque las plantillas braille son importantes para que esta población pueda votar, no resuelven todo el problema, pues no todas tienen las mismas necesidades.
“No todas leen braille, por ejemplo, la movilidad no es fácil, hay personas que viven solas o que han llegado a la discapacidad visual siendo analfabetas. Algunos adultos mayores por sus problemas de salud tienen el tacto afectado, y para leer braille se necesita tener un buen tacto y no todos lo tienen”, comentó.
Consideró que, a la par, es necesario implementar otras medidas, por ejemplo, un audio descriptivo. Además, los institutos electorales deberían difundir información sobre las casillas que tendrán plantillas braille, porque en algunas no siempre hay disponibles.
Sereno Villaseñor valora y agradece poder ejercer este derecho, como una forma de ser incluida, pues considera que las primeras personas que deben de buscar la inclusión son quienes tienen la discapacidad.
“Sé que, en la historia, las personas con discapacidad fueron incluso encerradas. Se les negó todo, hasta la educación. Y si nosotros desde la misma discapacidad no salimos a que la gente nos mire haciendo este ejercicio al que tenemos derecho, como otros rubros, si la gente no nos mira, nosotros, estamos delimitándonos, negándonos ese derecho”, platicó
Para Anahí Villegas Moreno, instructora de “Vemos con el Corazón”, los alumnos de esta institución de asistencia privada tienen claro que tienen el derecho a votar y ser votados, y saben que el próximo 2 de junio es una oportunidad para ser escuchados.