Cansada de ser revictimizada por algunos directivos, profesores y hasta de compañeros de clase, Nelly Concepción, presunta víctima de abuso sexual por parte del Rector de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), Ángel Garduño García, decidió alzar la voz.
“Han sido días difíciles por todo el proceso legal que conlleva y también por la revictimización que he sufrido en la universidad… Sí es pesado el pasar diario y ver tu rostro pegado, difamándote y haciendo aseveraciones, o tratando de vincularte con ciertos grupos y sacando fotos de contexto, sí es difícil”, cuenta en entrevista con La Silla Rota.
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Estudiante de cuarto año de la División de Ciencias Económico-Administrativas, con apenas 21 años, enfrenta una campaña de desprestigio y señalamientos dentro de la universidad por promover una denuncia por abuso sexual.
Y es que el señalado, ahora Rector con licencia, habría presuntamente agredido a la joven en octubre de 2022, cuando formaba parte del Honorable Consejo Universitario de la UACh, estructura encargada de la elección del rector en turno y la participación de los estudiantes.
El presunto agresor se ganó su confianza
Aunque en un principio la joven, originaria del estado de Veracruz, prefirió nombrarse Violeta para proteger su identidad y la de su familia, el acoso y las campañas de desprestigio en su contra que se han incrementado en semanas recientes, la motivaron a salir del anonimato.
“Yo necesitaba realizar un trámite académico y vine a Texcoco, y esa noche conocí a ese individuo, sólo sabía que era un consejero electo por el tercio de la comunidad, le comenté mi situación del trámite que necesitaba realizar y él, abusando de la buena fe que le tenía en ese momento, se ganó mi confianza, ofreciéndome su apoyo”, contó.
“Realmente no fui yo quien rompió el anonimato, fueron las personas que defienden a mi agresor. En un principio, para el proceso, se me había dado el seudónimo de Violeta N, para proteger mi identidad, tanto para mí como para mi familia; sin embargo, en distintos bots y perfiles fake han empezado a filtrar mi nombre”, dice.
Víctima de acoso, sin apoyo universitario
Ahora, asistir a clases, ingresar a la biblioteca o acudir al comedor universitario son tareas complicadas para Nelly, pues en paredes y accesos a los centros de estudio se colocaron hojas con su retrato impreso y leyendas en su contra que pretenden revictimizar y manchar su imagen.
“Toda nota periodística que salía se burlaban de mí: 'no es Violeta N, es Nelly Concepción y es estudiante de la DICEA y es una puta', porque así me llamaban… Me descalificaron por el simple hecho de ser mujer, por el libre desarrollo de mi personalidad”
“Si ellos mismos rompieron el anonimato y no les importa cómo me voy a sentir o cómo se va a sentir mi familia, a mí tampoco me importa dar la cara y a diferencia de ellos y no me tengo que esconder atrás de cuentas falsas”, dice.
Incluso, aunque la joven solicitó apoyo a organismos universitarios para garantizar sus derechos y la protección a su integridad, la falta de identidad de los agresores frenó la solicitud para retirar los anuncios que buscan, dice, dañarla psicológicamente.
“Cuando se pide el apoyo al UCAME, que es la instancia universitaria que se encarga de la convivencia, se tardan casi un mes en contestar un oficio en que se solicitó un protocolo para el cuidado a mi integridad física, moral y psicológica, pero la contestación fue un insulto porque dijeron que no había elementos suficientes porque era desde el anonimato y sólo estaba mi imagen y tenían que ser más específicos”, contó.
Acosan a su familia
Acompañada por profesores de su división, asegura que, tras la denuncia y los procesos legales para detener al presunto agresor, los ataques llegaron hasta sus seres queridos, pues personas se hacen pasar por personal administrativo para agredir a sus padres con llamadas telefónicas falsas.
“Estoy harta de la situación, que me revictimicen, que acosen a mi familia, han llegado a marcarle a mi mamá diciendo que según llaman de Chapingo, que tengo un asunto, en lo que mi mamá procesa lo que le dicen, le cuelgan y cuando intenta regresar la llamada no da línea”.
“Le llaman de números que no son universitarios y me cansé de eso, de darles el privilegio de mi silencio, me cansé de ser yo la que se tiene que estar escondiendo”, dice.
Apenas el pasado 5 de febrero, elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México intentaron cumplimentar una orden de aprehensión en contra del Rector de la UACh; sin embargo, fueron detenidos por alumnos y personal administrativo bajo el derecho de la autonomía universitaria.
“En cuanto se generó la orden de aprehensión y se intentó ejecutar empezaron los ataques a mi persona empezaron. Empezaron a pegar memes, que se me quiere vincular con grupos políticos alrededor de toda la universidad, sobre todo en la división donde estudio y en los comedores universitarios, sabiendo que es un servicio al que tengo que pasar todos los días”, dice.
“Es un proceso muy tedioso, se autorizó una orden de aprehensión derivada de la carpeta de investigación que se inicia en octubre de 2023, porque no fue una carpeta armada en diez días, como quieren hacer creer al interior de la universidad”, agrega.
Aseguró que la detención no se realizó debido a la presunta intervención del Jefe de la Unidad Jurídica de la UACh, Aron de la Rosa Zubrán, “no dejó que ingresara la policía de investigación a cumplimentar la orden de aprehensión, dio el argumento de la autonomía universitaria cuando, incluso la Suprema Corte tiene textos donde se explica los alcances de la autonomía, y no tiene nada que ver”.
“Es mentira que ingresaron armados; sin embargo, ya dentro de Chapingo hay grupos que, no son que forme parte de ellos, más bien mi agresor es quien tiene esos grupos a su poder, por eso cuando ingresan a cumplimentar ya había porros con exalumnos que defendían supuestamente la autonomía universitaria”, agregó.
Por el momento, la joven espera que en la próxima audiencia se defina la solicitud de amparo definitivo para determinar el inicio de un proceso penal en contra del Rector con licencia, quien deberá presentarse ante un juez para definir su situación legal.
“Yo espero que no se le brinde el amparo; sin embargo, si se le brinda, porque estoy consciente de los derechos de esta persona, yo le hago una abierta invitación a que deje de escudarse detrás de la universidad y que se presente y de la cara, porque estoy dando la cara y diciendo que no me voy a ocultar”.
En caso de que en esta audiencia le nieguen el amparo al denunciado, se tiene que cumplimentar una orden de aprehensión; mientras que, si se otorga, él se tiene que presentar con su propio pie ante un juez de control.
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