Dos camionetas incendiadas y dos personas detenidas, fue el saldo de la primera semana en que los vecinos de la comunidad de San Miguel Mimiapan, perteneciente a Xonacatlán, aplicaron operativos ciudadanos para evitar que los talamontes acaben con el Bosque del Agua.
Este fin de semana, relataron los miembros de este grupo de guardabosques civil, sujetos llegaron a la comunidad a amenazar de muerte a integrantes del comisariado ejidal, lo que generó que una turba lo retuviera e incendiara una camioneta cargada de madera extraída -presuntamente- de manera ilegal.
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“Desafortunadamente ya llevan años las autoridades que no hacen nada aquí en este pueblo, sí le pedimos de la manera más atenta que haga algo a la gobernadora Delfina Gómez Álvarez Gómez, que nos mande a la Guardia porque esto se está saliendo de control, ya lleva años esta tala”.
De trabajadores a guardabosques civiles
El domingo 14 de enero, los pobladores de San Miguel Mimiapan decidieron tomar en sus manos la conservación del Bosque del Agua, que abarca 17 municipios. Desde hace más de dos décadas ha sido atacado por talamontes que, aseguran, ya arrasaron con 75 por ciento del arbolado.
Se organizan por barrios y patrullan por las noches. Por ello la madrugada del domingo detectaron una camioneta ajena a la comunidad en la zona boscosa de Mimiapan y, después, fueron alertados sobre la presencia de talamontes frente a la delegación, ellos iban en otra camioneta cargada de “trozos”. Decidieron prenderle fuego a las unidades.
El domingo, sujetos llegaron al centro de esta comunidad, señalaron los vecinos, a amenazar de muerte al presidente del comisariado ejidal, por lo que los habitantes reaccionaron e incendiaron dos camionetas, una de ella cargada con madera.
“Vinieron a amenazar de muerte al comisariado, pero ya no es el delegado, ya no sólo es el comisariado; ya es todo el pueblo el que está en este problema, quieren luchar contra la tala, ahorita los bosques, la fauna silvestre, está muy acabada”.
Lamentaron que debido a la tala clandestina, los ojos de agua de la región se han ido secando por lo que padecen una incipiente crisis hídrica que los tiene en alerta.
“Mimiapan es muy rico en agua, ya se están secando bastantes mantis, entonces sí pedimos de la manera más atenta a las autoridades competentes, que hagan algo por el pueblo”.
La tala clandestina en Edomex
En el Estado de México, la tala clandestina se ha convertido en uno de los problemas sociales y medioambientales que ha aumentado, pues si bien los talamontes llevan décadas operando, se ha detectado la operación del crimen organizado en este ámbito delictivo.
Los municipios que concentran la incidencia son Lerma, Ocoyoacac, Zinacantepec, Huixquilucan, Jilotzingo, Joquicingo, Xonacatlán, Atlautla, Amecameca, Ecatzingo y Ocuilan.
Uno de los más afectados es el “Bosque de Agua” -como llaman a la reserva ecológica del Parque Otomí-Mexica-, que está integrado por 17 municipios. Si bien está catalogado como una reserva ecológica desde 1980, pobladores piden que se eleve la protección legal a este bosque para endurecer las penas que enfrentarían quienes lo saquean.
A nivel estatal, tan sólo en 2022, se ha registrado una pérdida de mil 310 hectáreas de bosque por lo que el gobierno mexiquense lanzó el Certificado Verde que busca confirmar que el origen de la madera empleado en empresas es legal.
Piden auxilio a Guardia Nacional para enfrentar talamontes
Los vecinos de Mimiapan señalaron que más que tomar justicia por mano propia, buscan que la Guardia Nacional les apoye con las labores de vigilancia dado que se trata de una reserva natural que ha estado a merced de los talamontes.
“Ya se puso un alto, ya estamos hartos de la corrupción que hay aquí y, como le digo, desafortunadamente tenemos un presidente de Xona que no hace nada, no trabaja, no hace nada, gobierno que entra, gobierno que sale y sigue siendo lo mismo”.
Destacaron que, si bien están dispuestos a enfrentar a los talamontes, no esperan llegar a un tema de linchamientos, por lo que esperan que los hechos de este fin de semana sean detonantes para mejorar las condiciones de seguridad en la zona y los mecanismos de protección de los bosques.
GPH