Si eres usuario del metro de la Ciudad de México entonces quizá te has percatado de algo que es muy normal y que a lo mejor no te has cuestionado: el color naranja del Metro en el exterior de sus vagones. Y es que la mayoría de sus trenes son color naranja, aunque en algunos de ellos se aprecian vivos de otros colores, pero aquí te contamos los detalles.
En este sentido, el Metro capitalino es sin lugar a dudas escenario de diferentes situaciones, desde películas, cortometrajes, exposiciones de fotografías, conciertos, sala de cine, exposiciones de ciencia, puntos de encuentro, lugares de entregas de artículos, hasta escenarios de peleas, molestias aglomeraciones y retrasos que día con día los pasajeros viven al trasladarse de un punto a otro por la cantidad de 5 pesos el viaje.
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Aunado a esto, desde que inició la construcción del Metro de la CDMX, antes Distrito Federal, sus vagones siempre han sido de color naranja y aunque en la actualidad hay líneas en las cuales ya se pueden apreciar otros colores, el anaranjado siempre es el sobresaliente, pero esto comenzó desde que la Línea 1 hizo su primer recorrido.
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De tal manera que sí hay una explicación y un sentido del por qué los trenes del Metro, también conocido popularmente como “limusina naranja” adoptó este color y aquí te lo contamos.
¿Por qué los trenes del Metro son de color naranja?
De entrada, debes saber que desde que comenzó a construirse la Línea 1 del Metro, el gobierno mexicano tuvo una muy buena relación comercial con Francia y ese país fue uno de los principales proveedores para la construcción del Metro. En tanto fue la compañía Alston quien tuvo un convenio millonario con el Gobierno de México.
Asimismo, en aquellos años, México adquirió con Alston los vagones del Metro y el modelo era MP-68, cuya particularidad era que sus ruedas eran de llanta u no de metal y los trenes venían de un color que era fácil de reemplazar, el color naranja. Es importante señalar que en aquellos años no existía la figura de Jefe de Gobierno en las entonces delegaciones del Distrito Federal, por lo cual existía el jefe del Departamento del Distrito Federal, persona designada por el presidente de Mécxico, en ese entonces, Gustavo Díaz Ordaz.
De tal manera que el logotipo de esta institución que gobernaba a la capital era de color naranja, razón por la cual se decidió que se conservara el color naranja con el que llegaron importados los vagones del Metro, color con el cual salían de los talleres de fabricación de la empresa francesa Alston.
BV