Naucalpan, Estado de México.- Las nuevas generaciones de jóvenes toman con reservas las cuestiones del matrimonio y más aún el tener hijos, por las responsabilidades que implica la crianza y la manutención, optando por adoptar incluso a lomitos como animales de compañía que consideran como parte de sus familias.
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Xiomara Saavedra de la asociación protectora de animales “SOS Mascotas y Rescate Ambiental, AC” entrevistada por La Silla Rota, dijo que en su caso ha platicado con algunos jóvenes y de acuerdo con lo que le han comentado, ha detectado causas muy diversas.
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Dijo que muchos de ellos están preocupados por que consideran que existe un consumo inmoderado de recursos que ocasionan un fuerte impacto ambiental, causado por la sobrepoblación humana.
Pero otros están más preocupados por el tema económico, “ya que un hijo representa un enorme gasto que, según creen, en algún momento podría ponerlos en dificultades financieras al no poder cubrir los gastos de alimentación, vestido y educación, entre otros que representa el tener un hijo”.
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A algunos otros les imponen más el estilo de vida que llevan en la actualidad, “sienten que un hijo podría limitar sus proyectos, tanto personales como profesionales, consideran que al tenerlos deberán renunciar a muchas actividades que requieren de mucha dedicación y que no consideran compatibles con la responsabilidad de crianza de un hijo”.
Explicó que otras más no se sienten ni preparadas, ni seguras para asumir la crianza de un hijo, “es decir que consideran que el rol de padres para educar un hijo es una responsabilidad muy complicada, ya que requiere de tiempo completo”, dijo.
En lo que todos coinciden es en que el futuro es incierto debido al cambio climático y sobre todo a la inseguridad que se vive en México, ninguno de ellos quiere desvelarse pensando en el futuro de un hijo.
Por lo que los jóvenes, dijo Xiomara, consideran una irresponsabilidad traer hijos al mundo para sufrir. En cambio, dicen que, al adoptar un perrito, contribuyen a su bienestar, ayudan a un animalito que necesita un hogar y que requiere el amor y cariño que ellos le pueden brindar.
Agregó que además de que su manutención es más económica comparada con los requerimientos financieros de un hijo, un perro se adaptará mejor a sus horarios, les dará compañía, cariño y será un ser de amor incondicional.
Xiomara Saavedra de la asociación protectora de animales “SOS Mascotas y Rescate Ambiental, AC”, consideró que por lo anterior las mascotas han pasado a ser parte fundamental en los hogares y familias en el país.
Dijo que un estudio realizado por la firma “GFK Pet Ownership”, nuestro país es de los considerados como más “petlovers” a nivel mundial, demostrando la importancia y respeto que los peluditos representan para los habitantes de esta nación.
Para las generaciones más jóvenes, la tendencia de tener perros o gatos sigue al alza, otro cambio de comportamiento ha comenzado a tomar fuerza ya que ellos no quieren tener hijos por la responsabilidad que implica.
Ante un entorno socioeconómico poco alentador, los jóvenes prefieren adaptarse a una mascota que los acompañe, sin la necesidad de invertir tanto tiempo como lo requiere ser responsable de una vida humana.
Para Tannya Bravo, quien dirige ADANA una asociación civil que surge con el propósito de gestionar el registro de la identidad de las personas que carecen de acta de nacimiento, los jóvenes de hoy no se quieren comprometer, señalan que tener un hijo sale caro. En estos o pagas renta, o pagas colegiaturas, compras ropa o cumples con todos los gastos para alimentación y recreación.
La especialista Mayra Daniel, en su artículo “¿Millennials y centennials, prefieren tener mascotas a tener hijos?”, publicado el 9 de septiembre de 2022, destaca que entre algunas de las razones por las que miles de personas eligen tener mascotas se encuentran: Requieren menos tiempo en el cuidado, el brindan amor incondicional, la inversión económica resulta más llevadera en una economía inestable, ayudan a combatir la depresión y ansiedad, disminuyen el sentimiento de soledad, ayudan a tener mejor humor y condición física, y dan sentido de responsabilidad.
Destaca en su artículo que, frente a un crecimiento exponencial en la tenencia de mascotas, los mexicanos también se han vuelto más conscientes, responsables y respetuosos en el cuidado de sus animales.
Añade el artículo que los bebés tienen necesidades complejas, que requieren cuidados especializados realizados por expertos y que tener una mascota no solo se limita a brindarle alimento y un lugar donde dormir.
No obstante, en el Estado de México en 2019 registró 182 mil 802 nacimientos, y dos años después, para 2021 la entidad mexiquense tuvo 217 mil 83 registros de niños recién nacidos, es decir que con la pandemia se tuvo un aumento de 34 mil nacimientos más, según datos del INEGI.
VGB